RIGA, 5 Nov. (EUROPA PRESS) -
El entrenador del Cajasol, Manel Comas, manifestó su descontento con el juego de su equipo tras la derrota ante el ASK Riga, en la que advirtió una especial fragilidad "en la defensa y el rebote" y un exceso de "estrés", como si no supieran "que éste es un partido de 80 minutos".
"Tenemos que mejorar sobre todo en defensa y en el rebote, pues son las facetas en que hemos estado especialmente mal. Hemos jugado con mucho estrés, como si no supiéramos que este es un partido de 80 minutos", advirtió el entrenador de los sevillanos, que puso el acento en la "falta de intensidad atrás". "Hemos dejado demasiadas segundas oportunidades", añadió.
Precisamente, otra de sus críticas se dirigió al juego interior, que se vio muy superado por la pareja formada por Bruno Sundov y Ricardo Marsh. "No puede ser que entre los cuatro pívots de ellos nos hayan metido 51 puntos. La defensa en la pintura tiene que ser más fuerte y más en partidos de competición europea", explicó.
Pese a todo, el técnico catalán confía en la remontada para el partido de vuelta, aunque reconoce que la eliminatoria "está de cara" para los letones, un equipo al que definió como "duro, consistente y bien dirigido. Han jugado un muy buen partido", dijo.
Para poder dar la vuelta al resultado en el San Pablo, Comas aseveró que su equipo deberá "cambiar muchas cosas", sobre todo las referentes a la mentalidad. "No podemos querer ganar los partidos en el minuto 5. Nuestras opciones pasan por ir paso a paso, intentando cobrar una renta pequeña en cada cuarto y así ir haciéndonos con el partido", analizó el técnico cajista.
