MANRESA (BARCELONA), 4 Ene. (EUROPA PRESS) -
El entrenador del Ricoh Manresa, Jaume Ponsarnau, explicó que tanto él como su equipo son los primeros en asumir los desaciertos que han tenido y sentenció que esto les lleva a "no tener el cien por cien de confianza", antes de que el domingo reciban al Unicaja en la decimosexta jornada de ACB, y sabedores de que necesitan un triunfo que no logran desde el 25 de noviembre.
"Ahora sabemos qué tenemos que hacer, lo sabemos y lo hacemos. Las sensaciones a nivel de trabajo son mejores que antes de empezar la temporada. Además, nuestro nivel de trabajo defensivo, algo que se había descuidado a la hora de adaptarnos a esta liga, está siendo muy bueno y el equipo está trabajando con honradez y honestidad, manifestó.
El técnico ilerdense comentó que el equipo manresano se encuentra en el camino correcto, a pesar de encontrarse con sólo dos victorias más que aquellos equipos en zona de descenso. "Estamos en el camino, pensando partido a partido y ante Unicaja intentaremos ser competitivos", dijo.
Aunque, el entrenador catalán no dudó en reconocer que hay una situación complicada. "Hay una situación difícil que parte de una liga en la que empezamos jugando muy bien, compitiendo muy bien y ganando partidos con buen juego. Empezaron a aparecer circunstancias después del partido en Fuenlabrada en el que perdimos jugadores que se lesionaban o enfermaban y esto afectó de una manera drástica nuestra dinámica de trabajo", destacó.
Por último, Ponsarnau comentó que el equipo necesita la ayuda de la afición para recobrar el crédito perdido y sumar una victoria tras seis derrotas consecutivas. "El equipo se siente en deuda con nuestra gente. La culpa es nuestra y está claro que si el Manresa quiera dar un paso adelante ha de ser fuerte y esto empieza por ganar los partidos de casa. Necesitamos a nuestra gente", terminó.
