CHARLOTTE (ESTADOS UNIDOS), 23 Ago. (EUROPA PRESS) -
El escolta Allen Iverson, uno de los agentes libres más cotizados del mercado de la NBA, está a un paso de fichar por los Charlotte Bobcats tras haber mantenido anoche una cena con Larry Brown, técnico del equipo, y Michael Jordan, copropietario del mismo.
Iverson, que bajó el mando de Brown alcanzó las finales de la NBA y fue en 'MVP' en 2001, busca un equipo en el que recalar tras su infructuoso paso por los Detroit Pistons la pasada temporada.
A sus 34 años, Iverson, busca un último contrato elevado en lo económico, algo a lo que Jordan no está dispuesto a concederle, tras su evidente bajón de nivel de las últimas temporadas en las que pasó de promediar más de 30 puntos por partido a no alcanzar la veintena en la última.
"Es un jugador determinante que nos puede guiar hacia nuestros primeros 'Play-offs', pero comprendo a Michael también, porque no se puede perder la cabeza por un jugador tan bueno a su edad", comentó Brown en declaraciones al 'Charlotte Observer' recogidas por Europa Press.
El pequeño escolta -no supera los 183 centímetros- ha sido designado durante su carrera en tres ocasiones en el quinteto ideal de la NBA, pero a diferencia de jugadores veteranos como Gary Payton o Alonzo Mourning, que sacrificaron su sueldo y su protagonismo en la etapa final de su carrera para ganar un anillo, Iverson parece que no está dispuesto a sacrificar nada.
Las exigencias del escolta es un contrato de tres temporadas a razón cada una de 15 millones de euros, una cifra astrónomica, sólo al alcance de estrellas como LeBron James o Dwight Howard. Iverson, que sigue siendo uno de los jugadores que más camisetas vende al año en la NBA, cuenta con esa arma mediática para exigir ese salario. Sin embargo, con estas pretensiones, Jordan y Brown han denegado su fichaje.
"Tenemos dos opciones: o rebaja sus pretensiones a cinco millones anuales o que firme por Detroit un contrato y luego intentaremos ficharle. Lo que no podemos permitirnos es un contrato de 45 millones a un tipo de 34 años. Le conozco mejor que nadie, pero eso no lo puedo permitir", concluyó Brown.
