El conjunto de Trifón Poch controló el partido hasta el descanso, pero cedió tras recibir un parcial de 12-0
VRSAC (SERBIA Y MONTENEGRO), 7 Feb. (EUROPA PRESS) -
El Etosa Alicante desperdició hoy la renta de nueve puntos que logró en el encuentro de ida de octavos de final de la Copa ULEB y se despidió de la competición tras perder en la cancha del Hemofarm serbio por un contundente 85-67, en un partido que tuvo controlado hasta el descanso.
El conjunto español comenzó a perder el duelo en el tercer cuarto, en el que encajó un parcial de 12-0 que marcó el resto del partido. Ni siquiera la buena labor del ex azulgrana Nacho Rodríguez, autor de 17 puntos, pudo levantar a los suyos en los últimos instantes.
El conjunto de Trifón Poch salió a la pista con la tranquilidad que le otorgaban los nueve puntos de colchón que traía de Alicante y la superioridad que mostró en tres cuartos de aquel encuentro, en el que pudo haber sentenciado la eliminatoria.
Fue un inicio plácido para sus intereses, con un intercambio de canastas en el que se sintió cómodo dada la buena respuesta de hombres como Rodríguez o Alain Digbeu, dos de los jugadores con mayor experiencia en citas internacionales como esta. El internacional español fue el encargado de reducir los cinco puntos de ventaja (21-16) que cobró el Hemofarm en los instantes finales de la manga.
EL ETOSA SUFRIO SU PRIMER MOMENTO CRITICO EN EL SEGUNDO CUARTO.
Antes del descanso el Etosa padeció un primer momento crítico propiciado por una serie de malas acciones defensivas que llevaron al cuadro serbio a recuperar los nueve puntos de desventaja (32-23, minuto 12). Robert Conley y Velimir Radinovic abrieron la brecha en el electrónico, pero los de Poch reaccionaron y cerraron el cuarto con una mínima desventaja (42-40).
Sin embargo, el sufrimiento para el equipo español no había hecho más que comenzar, pues el tercer cuarto concluyó con un parcial de 12-0 favorable al Hemofarm que cambió definitivamente el signo del choque. Del 55-54 que registraba el marcador en el minuto 26 se pasó, de la mano de un espléndido Vladan Vukosavljevic, al 67-54 con el que los jugadores afrontaron el periodo decisivo.
Entonces se implantaron los nervios en las filas alicantinas, que veían como una eliminatoria que en la ida pudo quedar finiquitada se les iba de las manos. Conley siguió anotando, elevó la diferencia hasta los 14 puntos (71-57, minuto 34), y ya no se volvió a saber del Etosa.
Lejos de encontrar la forma de anotar con comodidad, el conjunto valenciano llevó el partido a un carrusel de faltas personales del que salió reforzado el Hemofarm, que amplió paulatinamente su renta hasta lograr una diferencia de 18 puntos (85-67) y finiquitar su pase a cuartos de final.
