LOS ANGELES (ESTADOS UNIDOS), 13 Jun. (EUROPA PRESS) -
Los Angeles Lakers cayeron derrotados (91-97) en el cuarto partido de la final de la NBA por unos Celtics de Boston, que fueron desarbolados en una primera mitad de ensueño de los californianos, en la que recuperaron el juego colectivo que les ha caracterizado durante todos los 'play-offs', pero se dejaron ir en una segunda mitad en la que Ray Allen marcó las diferencias.
De este modo, los de Massachussets tendrán su primera oportunidad para conquistar el 'anillo' de campeones en el último encuentro de la serie en Los Angeles, después de colocar el tercer punto (3-1) de manera sorprendente a tenor del inicio de los angelinos.
Y es que los de Phil Jackson incluso se permitieron dejar una marca para la hemeroteca al final del parcial inicial, al lograr la mayor ventaja de la historia de las finales tras el primer cuarto, después de un abrumador parcial de 35-14 en el que los Lakers mostraron un baloncesto vistoso y fulgurante en el que Lamar Odom era el gran referente (7/7 en tiros de campo).
Junto al versátil '7' angelino, el serbio Vladimir Radmanovic y el español Pau Gasol, que completó el encuentro con 17 puntos y 10 rebotes en 39 minutos de juego, también elevaron sus prestaciones con respecto a anteriores partidos haciendo olvidar a los aficionados del Staples Center la tan traída 'Kobedependencia'.
En el otro lado de la pista, los Celtics echaban todas sus miradas al maltrecho tobillo de Rajon Rondo que, acusó el esguince sufrido en el partido anterior. Una mala noticia en la 'receta' de los Celtics a la que le seguían faltando demasiados 'condimentos' con Paul Pierce desaparecido y Ray Allen como único 'sazonador', pues Kevin Garnett volvió a estar lejos de su mejor rendimiento, además de cargarse con dos faltas demasiado pronto.
Pese a todo, tras un comienzo de segundo parcial en el que Lakers mantuvo el ritmo frenético, los visitantes se hicieron notar por primera vez sobre el parqué con un parcial de 18-8 para situarse a tan sólo doce puntos (45-33).
Sin embargo, de ahí al paso por las duchas, los de 'oro y purpura' lograron retomar el paso e incluso volvieron a estirar sus diferencias hasta los dieciocho puntos (58-40), gracias a un nueva jugada de tres materializada por Gasol y un triple sobre la bocina de Jordan Farmar.
KOBE APARECE Y RAY ALLEN DECIDE
La reanudación trajo la primera canasta en juego de Kobe Bryant. No fue un simple dato para la estadística, pues también mostró la metamorfosis sufrida por los de Jackson en la segunda mitad. El 'MVP' de la liga regular acaparó mucho más juego y no volvió a haber noticias de los Odom, Radmanovic o Vujacic.
Boston no recortó la diferencia con grandes parciales, pero poco a poco, punto a punto, se fue acercando en el marcador. El acierto desde el perímetro de James Posey y un '2+1' de Pierce, tras superar hasta tres defensas rivales acabó de convencer a los de 'Doc' Rivers, que se vieron casi sin quererlo con empate a 75.
Pese a gozar de varias ocasiones para ello, los visitantes nunca llegaron a ponerse por delante, hasta que a falta de 4:07 llegó el 83-84, tras una nueva acción de Pierce. Sin embargo, las posesiones decisivas cayeron en otro miembro del 'Big Three': Ray Allen.
El tirador resultó clave con un rebote ofensivo, que acabó meciendo en la red tras una larga jugada con cierto aire a Michael Jordan. Allen remontó la línea de fondo y realizó hasta tres rectificados en el aire para superar a Odom y Gasol antes de anotar aro pasado. Además, con 16 segundos para el final y tres de ventaja, el ex de Seattle dio la puntilla al aprovechar un aclarado para anotar una bandeja, que aseguró el 3-1 y el primer 'match ball' para su equipo el próximo domingo.
