Ciclismo/Tour.- (Ampl.) Pereiro y Sastre revolucionan el Tour en La Toussuire

Actualizado: miércoles, 19 julio 2006 20:17

El gallego se viste, de nuevo, de amarillo y el madrileño se aúpa al segundo puesto en la general tras ser tercero y segundo en la etapa

Por vez primera, dos españoles ocupan los dos primeros lugares del podio

LA TOUSSUIRE (FRANCIA), 19 Jul. (EUROPA PRESS) -

El corredor español Oscar Pereiro, del Illes Balears, recuperó el jersey amarillo en la decimosexta etapa del Tour de Francia, disputada entre Bourg d'Oisans y La Toussuire sobre 182 kilómetros, que se adjudicó el danés Mickael Rasmussen, del Rabobank, por delante de Carlos Sastre, del CSC, y el propio Pereiro.

Pereiro se enfundó, de nuevo, el amarillo que le había arrebatado la víspera el estadounidense Floy Landis, del Phonak, en Alpe d'Huez, la mítica cumbre de las 21 curvas en la que se quedó a dos pedaladas -diez segundos apenas- de conservar la prenda que conquistó en una etapa consentida.

"Ahora nadie me ha regalado nada", apuntó el gallego del Illes Balears al término del festival español en el inédito La Toussuire, un 'col' con 18,4 kilómetros de asfalto empinado, un desnivel máximo del 10 por ciento y medio del 5,9 por ciento en el que las piernas del escudero de Lance Armstrong, Floyd Landis, se quedaron sin oxígeno.

La 'caída' le sobrevino a Landis en una jornada de ciclismo a la vieja usanza, con ataques lejanos como el de Levi Lepiheimer, al estilo Claudio Chiapucci, escaladores desfogados, caso de Rasmussen, el vencedor, o Carlos Sastre y diplomacia estratégica, que unió a T-Mobile e Illes Balears en el hundimiento del americano.

La revolución del Tour, una carrera en la que parecía que Armstrong había cedido testigo y monopolio al calculador Landis, llegó con un arranque de furia de Sastre -posterior a otro de Denis Menchov- a menos de 15 kilómetros para la cumbre en La Toussuire.

Entonces, las piernas se le aflojaron al pupilo de John Lelangue, huérfano ya del hijo de Eddy Merckx, Axel, y que vio cómo se quedó sólo en su agonía. Restó por detrás de Menchov, que también cedió en el último tramo, de Kloeden, el pupilo de Ullrich, Cadel Evans, el 'canguro' australiano del Lotto, y Pereiro, grapado a la rueda del alemán.

El cachorro de Echávarri-Unzúe apartó los impulsos de sus doloridas piernas que el cerebro le enviaba y se imaginó en la crono del sábado enfundado aún en la túnica amarilla del líder del Tour. Incluso, se permitió la osadía de esprintar y arrebatar el tercer puesto en una jornada heroica a Evans y Kloeden.

Antes Ramussen había abierto sus brazos en señal de cruz por el calvario de cerca de 175 kilómetros recorriendo en fuga los colosos Galibier, Telegraphe, Croix de Fer, Mollard y La Toussuire. Asfixiado llegó también Sastre, a 1:41, consciente de su gesta, y gozoso Pereiro, a 1:54. Menchov perdió 3:42 y Landis, 10:04.

En la general, Pereiro aventaja a Sastre, segundo, en 1:50 y a Kloeden, en 2:29. Haimar Zubeldia, del Euskaltel, es décimo, a 8:06, justo por delante de Landis, el gran derrotado por el ciclismo de antaño y las rampas de La Toussuire.

Mañana, se disputa la decimoséptima etapa entre Saint Jean de Maurienne y Morzine, de 200,5 kilómetros y cinco puertos, el último de fuera de categoría, el Joux Plane, a 12 kilómetros de una meta en la que ya han hecho historia Angel Arroyo y Eduardo Chozas. Por vez primera, dos españoles lideran el Tour antes de llegar a la ciudad de la Alta Saboya.