SAN SEBASTIAN, 13 Oct. (EUROPA PRESS) -
El técnico de la Real Sociedad José Mari Bakero afirmó hoy el que el Real Zaragoza, al que se enfrentan el domingo en Anoeta, es el rival ideal para que su equipo muestre una reacción que cambie la dinámica negativa del inicio liguero, y está convencido de que la respuesta de los suyos será positiva.
"El domingo va a ser una gran prueba para nosotros, va a ser un partido difícil, pero estoy convencido de que vamos a responder", aseguró Bakero, que una vez más incidió en que le "gusta lo que ve en su equipo.
"Creo que estamos consiguiendo el espíritu que siempre ha intentado tener la Real Sociedad. Una semana más vuelvo a repetir que me gusta el corazón de este equipo", añadió.
Y es que tiene claro que el Real Zaragoza, que "junto con el Villarreal, es uno de los mejores equipos de toque de la Liga" les va a exigir "muchísima concentración en defensa y valentía en ataque". Aunque, por contra, la Real también debe aprovecharse de los puntos débiles del rival que, dado su juego ofensivo, "sin balón puede que sufran algo más que otros equipos".
"Es uno de los equipos más verticales, y Víctor Fernández siempre ha sido un entrenador de los que le gusta jugar muy bien al fútbol", describió Bakero, que puso nombre propio a la verticalidad: Pablo Aimar.
"Es como Iván de la Peña, incluso más peligroso cuando tú estás atacando, porque se coloca en posición de recibir y hacer daño en la transición". Pero, por supuesto, no es el único. "Diego Milito mismo tiene grandes movimientos en ataque, igual que el brasileño (Ewerthon), aunque no sabemos si jugará", apuntó.
Bakero es consciente de que en el ambiente se percibe miedo al Zaragoza "por la inercia" negativa del equipo, pero no es un sentimiento que comparta. "Yo respeto sí que le tengo, pero miedo ninguno. Prefiero un equipo así que uno digamos entre comillas 'modesto', porque va a hacernos salir muchísimo más concentrados", explicó.
"Tengo ganas de ver la respuesta de mi equipo en el campo", añadió el entrenador guipuzcoano que espera que los suyos dejen de lado la ansiedad. "A veces parece que hay que ganar en el minuto ocho", y no es así, señaló, citando como ejemplo al mismo Real Zaragoza, que en su último partido iba perdiendo 0-2 y logró empatar porque "siguió con paciencia".
"Nosotros tenemos que transmitir ese saber estar, y jugar a lo mismo con goles a favor o en contra. Esta temporada va a ser muy dura para todos los equipos, y tenemos que ir psicológicamente preparados para eso", matizó.
Bakero considera que el parón liguero "en general le ha venido bien al equipo". "Nos ha servido para hablar mucho más, reflexionar, trabajar fuerte, y a mí para salir de esa vorágine partido-alineación".
Asimismo, el descanso también ha valido para recuperar completamente a varios de los 'tocados' (Fabio Felicio, Xabi Prieto, Novo, Skoubo), o jugadores que están bien "pero que tras una lesión tan larga tienen altibajos, que es el caso de Aranburu".
Precisamente, la entrada de Mikel Aranburu por Novo es el único cambio que se prevé. "Si uno es coherente con su propio discurso, demasiados cambios no puede haber", reveló el técnico vasco. Aunque no sería descartable ver sobre el campo a Kovacevic y Skoubo juntos "ya sea de inicio o durante el partido". "Skoubo tiene aún algunas molestias, pero está para jugar. Y como dije en su presentación, cuando yo era director deportivo, creo que es perfectamente compatible con Darko".
LA COPA, "PRECIOSA"
José Mari Bakero se refirió, por último, a la Copa del Rey, una competición "preciosa" que "no" supone ningún problema para la Real en su situación. "A mí me suena bonito. Es una competición preciosa, y empezar contra un equipo como el Málaga, creo que es una buena forma de entrar en la Copa".
Y no tiene por qué hacer como otros entrenadores estos últimos años, llenando de suplentes las alineaciones de las primeras rondas coperas. "Ahora, con todos los jugadores en plenitud, estamos para jugar con los mejores dos partidos a la semana", concluyó.
