LISBOA, 1 Sep. (de la corresponsal de EUROPA PRESS, Patricia Ferro) -
La Federación Portuguesa de Fútbol, con el apoyo del gobierno, va a invocar el próximo lunes "interés público" para solucionar la grave crisis que vive el fútbol portugués, a raíz del conocido "Caso Mateus" y que le puede costar la expulsión de la Liga de Campeones al Oporto, Benfica y Sporting.
Después de casi tres horas de reunión con el secretario de Estado para el Deporte, Laurentino Dias, y con el presidente de la Liga de Clubes, Valentin Loureiro, el máximo responsable de la FPF, Gilberto Madaíl, anunció que el lunes, el organismo que preside "invocará la declaración de interés público, ahora con más motivos, con el objetivo de normalizar el fútbol portugués". "Ese será el próximo paso para que el problema esté resuelto durante el transcurso de la próximo semana", afirmó Madaíl.
Según esta posición, las competiciones podrán seguir su curso normal, según lo que decidieron los órganos deportivos lusos. Es decir, el Gil Vicente desciende a II división y el Belenenses se mantiene en Primera. Siempre y cuando el Consejo de Justicia de la FPF no acepte el recurso presentado por el Leixoes, que pretende ocupar el lugar del Belenenses.
El gobierno ha dado su apoyo a esta determinación de la FPF ya que según explicó el secretario de Estado, que fue quién convoco la reunión, "este no es un problema del algunos clubes, pero sí de la imagen del país". "Estoy convencido que con esta toma de posición convergente entre Federación y Liga, el fútbol portugués quedará normalizado", matizó.
Hay que recordar que el Belenenses y Académica denunciaron al Gil Vicente por inscribir como profesional al delantero angoleño Mateus, después de que éste fuese rechazado por la Liga y acudiese a instancias judiciales administrativas, lo que está prohibido por la Liga y es castigado con una pena de descenso de categoría.
Sin embargo, el Gil Vicente alegó que fue el jugador angoleño y no el club el que recurrió a la justicia civil para intentar jugar en la Primera División en la pasada temporada, por lo que el castigo era injustificado y por lo que están recurriendo ante los tribunales.
Incluso, el club luso presentó una medida cautelar ante el Tribunal Administrativo de Lisboa para lograr que el club disputara el próximo domingo la primera jornada de la Primera División o impugnar la Liga portuguesa de fútbol.
