PARÍS, 24 Nov. (EP/AP) -
El presidente francés, Jacques Chirac, definió como una "vergüenza" el incidente racista que se produjo anoche a la conclusión del partido de la Copa de la UEFA entre el París Saint-Germain y el Hapoel Tel Aviv, que acabó con la muerte de un aficionado radical del equipo parisino.
Jacques Chirac, que participaba junto a su homólogo italiano Romano Prodi en una cumbre celebrada en Italia entre los dos países, subrayó que este tipo de acción "inspira una sensación no sólo de condena, no sólo de estupefacción, sino también de horror".
Tras el encuentro europeo, unos cien seguidores del equipo local arremetieron contra los seguidores del Hapoel de Israel insultándolos con gritos racistas y un hincha se vio acorralado por unos 150 franceses. Un policía de paisano que presenció la acción lanzó un bote de gas lacrimógeno para evitarlo.
Después de ser derribado y golpeado en el suelo, el oficial sacó su arma reglamentaria y efectuó un sólo disparo, según fuentes policiales, que acabó con la muerte de un fan de 24 años, identificado como Julien Quemener, y un herido grave de 26, ambos aficionados del grupo radical de extrema derecha del PSG con antecedentes.
El policía, Antoine Granomort, ha sido interrogado sobre los detalles del incidente para determinar cuándo disparó, cuántos disparos hizo y bajo qué circunstancias, señalaron oficiales judiciales y de la policía.
Por su parte, según un comunicado emitido por el grupo al que pertenecía la víctima, éstos también se suman a la condena a la violencia racista. "Por supuesto que estamos horrorizados por lo que sucedió y pedimos calma a todos los seguidores parisinos", añadieron.
