MADRID, 26 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Valladolid, que sumó su sexto triunfo consecutivo tras golear a domicilio al Real Murcia, por un contundente 1-4, consiguió alcanzar la segunda plaza, empatado a puntos con el Xerez, que no pudo pasar del empate ante el Almería, mientras que el Salamanca tropezó en su visita a Málaga (1-0), y perdió la oportunidad de unirse a los de cabeza.
El conjunto vallisoletano amargó el debut de los murcianos en la Nueva Condomina, y es que los pucelanos, que llegaban lanzados con unas estadísticas muy favorables, confirmaron los pronósticos ante un rival directo, en un encuentro que se les puso de cara muy pronto, y en el que los locales llegaron a fallar hasta dos penaltis.
Con la victoria, el conjunto que dirige Mendilibar empata a puntos con el Xerez, además de reafirmar su candidatura al ascenso, y dejar más apretada que nunca la Segunda División del fútbol español tras la disputa de la décimo cuarta jornada.
EL SALAMANCA FALLA Y EL MÁLAGA SALVA UNA SEMANA DIFÍCIL
El tercero en discordia, el Salamanca, no aprovechó la posibilidad de compartir el liderato con Xerez y Valladolid y cayó ante el Málaga, que con el solitario gol de Salva, supo sobreponerse a una semana muy difícil, una vez que su presidente, Fernando Sanz, anunció que el club se acogerá a la ley concursal.
El triunfo sirve a los andaluces para romper la racha negativa de resultados que les venía acompañando, y es que desde la octava jornada, donde se impusieron al Las Palmas, el Málaga contaba todos sus partidos por empates o derrotas.
En el Carranza, Cádiz y Poli Ejido empataron a cero, un resultado que no sirve a ninguno de los dos equipos. Mientras que los gaditanos acumulan con ésta su quinta jornada sin ganar, y comienzan a acercarse a las zonas peligrosas de la clasificación, el Poli ve cómo el tren del ascenso comienza a alejarse, tras el tropiezo de la semana pasada y éste.
Además, el Hércules, frente al Las Palmas, y el Tenerife, ante el Lorca, firmaron las tablas a un tanto, en dos encuentros que reflejaron la igualdad de los equipos, que situados en la zona media-baja de la tabla tuvieron miedo a perder y no arriesgaron en ningún momento.
