LISBOA, 27 Mar. (de la corresponsal de EUROPA PRESS, Patricia Ferro) -
El entrenador del FC Barcelona, Frank Rijkaard, explicó hoy en Lisboa, donde su equipo disputa mañana ante el Benfica el partido de ida de cuartos de final de la Liga de Campeones, que no ve relajación en los jugadores del Barcelona y destacó la dificultad del partido.
Rijkaard, además, no cree que pueda hablarse de favorito en una eliminatoria de este nivel en la Liga de Campeones, aunque horas antes, en una rueda de prensa en Barcelona, había asumido el papel de favorito que le concede el famoso "entorno" del club catalán.
"Me han preguntado y he dicho que tenemos que asumir el papel de favorito, pero para mí nunca existen favoritos. Estamos en un nivel muy alto, tenemos que jugar fuera de casa contra un gran equipo y el partido siempre empieza con 0-0", explicó el técnico holandés.
En su opinión, haber eliminado al Chelsea, considerado un rival más peligroso, no ha relajado a sus jugadores. "No se han relajado y ahora viene otro partido muy importante ya que el Benfica, aunque quizá no pase por su mejor momento, será complicado", señaló.
Rijkaard dijo que el equipo portugués "es un gran equipo que tiene una gran historia y hay que prepararse para el partido". "Es un equipo maduro con mucha fuerza física, por lo que hay que prepararse físicamente pero también en el juego", añadió.
En cuanto a las declaraciones de Ronald Koeman en que manifestaba que el Barcelona va "sobrado", que éste ya ha matizado, Rijkaard cree que se han malinterpretado porque hablaba del entorno y que Koeman ha subrayado el "respeto" mostrado por el Barcelona hacia el Benfica.
"NINGUN RESULTADO ES TRANQUILIZADOR".
Preguntado por un resultado con el que estaría tranquilo para afrontar la vuelta, además, Rijkaard consideró que a estas alturas de la competición "ninguno es tranquilo". Por otro lado, no quiso dar pistas sobre el once ni el planteamiento del Barcelona en Lisboa.
"Ya lo veremos, pero lo importante es empezar con 11 jugadores con el espíritu correcto y poder acabar el partido con once", se limitó a decir, sin querer adelantar nada sobre su apuesta en defensa, donde no estarán Puyol, sancionado, Márquez ni Edmílson, lesionados.
Tampoco desveló la duda existente en el centro del campo entre Andrés Iniesta, titular en los últimos partidos, y Mark van Bommel, y, preguntado por sus características, apuntó las "diferencias físicas, ya que uno es bastante bajo y el otro bastante grande".
