Fútbol.- Quique Sánchez Flores: "Ha sido un temporada lo bastante dificultosa como para no cerrar la herida"

Actualizado: jueves, 28 junio 2007 21:33

VALENCIA, 28 Jun. (EUROPA PRESS) -

El entrenador del Valencia, Quique Sánchez Flores, realizó un balance de la temporada recién terminada y aseguró que fue "lo suficientemente costosa y dificultosa como para no cerrar la herida" en referencia a su mala relación con Amedeo Carboni y que se pusiera en tela de juicio su puesto como técnico.

"Todos saben la complicación que ha supuesto estar entre los mejores de Europa, es algo que ha puesto a prueba el espíritu colectivo de este equipo y tomo nota", manifestó. "Hemos conseguido el objetivo, destacando lo de conseguir el objetivo mínimo con un gran esfuerzo de los futbolistas en número reducido por las lesiones", agregó.

Sobre su relación con Carboni, recalcó que "a nadie le puede extrañar" que asegure que fue una situación "difícil, enrevesada y complicada", aunque confía en que ese distanciamiento fuera provocado por "diferencias de criterio deportivo". Quique deseó al ex director deportivo "suerte en la vida y la profesión" y le pidió "reflexión para ser más comprensivos con los empleados que tenemos".

"Ha sido muy triste y decepcionante formar parte de una historia cruel en la que creo que nadie se sentiría agraciado de participar", indicó el técnico, decepcionado con todo lo que ha sucedido. "Yo llegué a este club con la ilusión de recuperar a un equipo entre los grandes de España y Europa y ganar títulos, no a enfrentarme en una batalla persona", lamentó.

El madrileño respetó la decisión de Juan Soler de destituir al de Arezzo. "La opinión del presidente está por encima de la de cualquier otro del club y no es debatible", indicó. "Yo nunca me planteé dimitir, pero sí tener un buen ambiente de trabajo para la próxima temporada. Se le planteó al presidente porque no era beneficioso para el Valencia, es el club el que finalmente toma la decisión", añadió.

El preparador ché aseguró que nunca perdió los nervios porque se cuestionara su continuidad, ya que el club buscaba un recambio en el banquillo. "No me preocupa, desde que llegué me dicen que el Valencia busca entrenador. Le pasó a Cúper, Benítez y Ranieri. Eso al entrenador del Valencia le hace sentirse más alerta y si, puede hacer algo más de trabajo, intentarlo", aseguró.

Otro asunto polémico fue el despido de sus ayudantes Paco de Miguel, Ángel Puebla y Emilio Álvarez. "Fue una decisión personal e independiente, el dueño del club no ha tenido nada que ver. Cuando una persona tiene la capacidad para integrar al grupo también la tiene para desintegrar, es la única lectura existente", espetó. "Las valoraciones son de ámbito privado y no voy a dar explicaciones públicas", sentenció. "Sí que quiero agradecer públicamente el esfuerzo que tuvieron", continuó.

Quique no quiso echar la culpa de las lesiones al anterior preparador físico De Miguel. "El por qué es algo que no está determinado, ni siquiera por los especialistas más contrastados del país. Nosotros hemos llegado a determinadas reflexiones que nos pueden dar señales para la próxima campaña y no volver a repetir lo sucedido", explicó.

"Todo es mejorable, desde el máximo responsable técnico que soy yo a cualquiera de las figuras. Paco de Miguel es un profesional metódico, estudioso y exigente que ha hecho lo posible para cumplir con las expectativas", agregó el técnico. "El que ha dado todo lo que tenía no está obligado a dar más, los nuevos vendrán igualmente exigidos", prosiguió el entrenador.

En cuanto a los fichajes, el madrileño defendió la llegada de jóvenes valores como Sunny, Arizmendi o Mata. "Estamos absolutamente convencidos de la política de futuro del club. Lo primero es recuperar a futbolistas que tuvimos lesionados, con su vuelta nos parecerá un equipo nuevo", señaló. "Estamos en la élite y nuestros objetivos siempre son máximos, pero estamos de acuerdo en que debemos tener un soporte de gente joven, son jugadores contrastados que vienen a ayudar", aseguró.

Quique subrayó que habrá "consenso" con el nuevo director deportivo, Miguel Ángel Ruiz, sobre el tema de fichajes y salidas. "La política deportiva la marcará Ruiz, pero hay un consenso e igualdad de criterio para hablar de futbolistas", explicó. "Los puestos están bastante claros, pero hay una prioridad por un puesto que nos ha sido dificultoso que es el de creador", añadió.

Por último, se marcó metas importantes para el próximo año, su tercero en el banquillo blanquinegro. "Mi objetivo es el del club y eso es llegar a lo máximo en todo lo que vamos a disputar", indicó. "Somos un equipo de élite que sostiene a la Selección y vamos a darlo todo. No vamos a reservar ningún esfuerzo ni músculo, haremos el desgaste necesario hacia fuera y no hacia adentro", terminó.