BARCELONA, 21 Ago. (EUROPA PRESS) -
Joan Laporta será reelegido mañana presidente del FC Barcelona, hasta 2010, sin tener que celebrar unas nuevas elecciones, ya que ninguno de los otros dos precandidatos a la presidencia lograron las 1.804 firmas de apoyo de socios necesarias para erigirse en candidatos.
Laporta presentó en las oficinas del Barcelona 8.700 firmas de apoyo, unas 3.500 más que en el proceso electoral de 2003, cuando llegó a la presidencia, mientras que tanto Jordi Medina como Jaume Guixà se quedaron sin superar el corte de las firmas.
Guixà mantuvo la incertidumbre hasta media hora antes del cierre del plazo de presentación de las firmas y anunció que contaba con 1.694 firmas. Unas horas antes, Medina, que tampoco reunió los apoyos necesarios hace tres años, dijo haber alcanzado algo más de 1.400 firmas.
De esta manera, el plazo para la presentación de las firmas, que concluía hoy a las 21 horas, supone también el final del proceso electoral del Barcelona, que contemplaba la celebración de comicios el 3 de septiembre en caso de que hubiera más de un candidato.
La directiva de Joan Laporta será proclamada mañana de manera oficial, una vez la junta electoral proceda a la validación de las papeletas presentadas, que fueron llevadas a las instalaciones del club en cuatro cajas por el propio Laporta y otros miembros de la directiva.
La junta de Laporta, que en su mayoría llegó al Barça hace tres años junto al presidente, ha recibido el respaldo de los socios para seguir al frente del club después de que una sentencia judicial obligase al club a convocar elecciones de manera inmediata, de acuerdo con los estatutos.
El Juzgado de Primera Instancia número 30 de Barcelona dio la razón al socio que presentó una demanda contra la directiva, Joan March Torné, que reclamaba la celebración de elecciones este año, ante la intención de la junta de convocar los comicios en 2007.
La polémica sobre la fecha de las elecciones radicaba en los ocho días del final de la temporada 2002/03, en que la junta de Laporta ya había tomado posesión y que, según los estatutos del club, constituían el primero de los cuatro años de mandato de la directiva.
La directiva, sin embargo, entendía que había sido elegida para gobernar el club durante cuatro años y defendió, hasta el fallo judicial, su intención de celebrar elecciones en 2007, como también lo recomendaba un informe jurídico de la Generalitat de Catalunya.
