MADRID, 20 Feb. (EUROPA PRESS) -
El entrenador del Valencia, Juan Antonio Pizzi, reconoció que la revuelta social de Ucrania pudo "haber incidido" en el Dinamo de Kiev en el partido de ida de los dieciseisavos de final de la Europa League (0-2), que se celebró en Nicosia (Chipre) por este mismo motivo.
Pizzi, contento por el triunfo, prefirió no lanzar las campanas al vuelo. "Indudablemente no hay que dar cosas por conseguidas hasta que no las consigues. Hemos dado un paso importante, un buen resultado. Y creo que hemos demostrado en el marcador la superioridad del segundo tiempo", espetó el técnico 'che'.
"Me quiero tomar la victoria con tranquilidad porque aún queda un partido. Es cierto que estamos en la dirección correcta, pero queda un partido", incidió el argentino, consciente de que la situación política haya podido condicionar a su rival.
"Es una situación rara, incómoda, tuvimos el trastorno de modificar el viaje. Hemos venido con cierta incertidumbre, pero nos han tratado muy bien en esta competencia. Pero entiendo que lo que ocurre en Kiev puede haber incidido en el desarrollo del partido", comentó.
"Jugaron sin sus seguidores y seguramente muchos de sus familiares y amigos estén viviendo una situación social muy difícil. Su situación es muy comprometida. Pero al margen de todo esto, les respeto mucho porque sé que la eliminatoria no está definida. Vamos a tener un partido complicado en Mestalla", finalizó.
