Real Madrid y FC Barcelona afrontan un 'clásico' de reivindicaciones

Actualizado: sábado, 21 octubre 2006 17:59


MADRID, 21 Oct. (EUROPA PRESS) -

El Real Madrid y FC Barcelona afrontan el primer 'clásico' de la temporada, su particular duelo liguero, con aires reivindicativos porque los blancos necesitan reafirmar su nuevo proyecto ante el equipo referencia en España y Europa, y los azulgrana frenar cualquier atisbo de duda sobre su hegemonia.

El duelo, desequilibrado en lo futbolístico, ha ido equiparándose en lo emocional en el transcurso de una semana que sirvió de bálsamo para los locales y de achuchón para los azulgrana. El Real Madrid alcanza el encuentro en un momento álgido, aunque sólo una semana después de que el proyecto de Capello se tambalease de mala manera en Getafe.

El renombrado espíritu de equipo o la actitud son los bastiones con los que el técnico italiano trata de levantar el vuelo de un equipo limitado en lo futbolístico, carente de calidad en algunos de sus jugadores y sobre todo cuando se le compara con el FC Barcelona, un conjunto sensiblemente superior en el plano individual y también en su funcionamiento colectivo.

Los blancos tratarán de parecerse al Sevilla o al Chelsea, los dos equipos, que con un orden impecable, un esfuerzo titánico y una agresividad permanente, hicieron añicos el 'jogo bonito' azulgrana. Para ello contarán con una afición expectante, deseosa de mostrarle todo su apoyo al equipo y de que no se repita el escenario del año pasado cuando reprobó el 'florentinismo tardío' dedicándole una sonora ovación a los de Rijkaard.

En principio, Capello repetirá el mismo 'once' que resucitó en Bucarest, con la inclusión de Robinho en lugar de Beckham, y es que el inglés empieza peligrosamente a acostumbrarse al banquillo. El preparador italiano es de los que cree firmemente que si algo funciona no es necesario retocarlo.

Le gustó la disposición de Sergio Ramos en el lateral y por tanto devolverá a Helguera, del ostracismo absoluto a la titularidad en tres partidos consecutivos, al eje de la zaga junto a Cannavaro. Y del resto no hay dudas con la presencia de Guti, Raúl y Robinho, junto a Van Nistelrooy, y sin que Ronaldo pueda ser de la partida después de que los recursos del equipo blanco se estrellaran con los Comités y el brasileño pague caro lo absurdo de su actuación de Getafe.

UN BARCELONA HERIDO Y SIN SU PUNTA DE LANZA EN MADRID.

El FC Barcelona, por su parte, también se toma el clásico como una oportunidad para reivindicarse, un papel que correspondía a su rival a principios de semana pero que los azulgrana han asumido después de la derrota (1-0) ante el Chelsea, que ha reabierto muchas dudas.

El equipo de Frank Rijkaard cayó en Stamford Bridge, donde la pasada campaña presentó su candidatura a la Liga de Campeones camino de su éxito en la final de París, y ahora vuelve al Bernabéu, que fue escenario de otra de sus grandes actuaciones la pasada campaña.

Ronaldinho, con dos goles que merecieron el aplauso de buena parte de la afición madridista, y el ahora lesionado Eto'o, que abrió la cuenta y mantuvo su buena racha ante el Madrid, le dieron al Barça un 0-3 inapelable que hundió a los blancos en una profunda crisis.

En esta ocasión, el Barcelona llega herido en su orgullo y sin su punta de lanza, Eto'o, del que empezó a acordarse en Londres y que será el gran ausente en el Bernabéu, donde siempre ha marcado como azulgrana y que suele motivar como ningún otro sitio al camerunés.

Y con Ronaldinho situado en el punto de mira. Al brasileño se le ve con unas ganas tremendas de tapar bocas por las críticas que le acompañan desde el Mundial, lo que convierte el clásico en el escaparate perfecto para mostrarse como el mejor jugador del planeta.

Dos goles a balón parado ante el Sevilla hace una semana hicieron resurgir al Gaúcho, aunque defraudó en Londres, donde el mejor fue otra vez Messi, que también brilló la pasada jornada de Liga ante el Sevilla y que fue determinante para salvar el empate en Bremen.

Messi, Ronaldinho y, seguramente, Gudjohnsen, formarán el ataque en Madrid, con Giuly y Saviola como recambios. En la media, se mantienen las dudas de cada partido entre Xavi, Iniesta, Edmílson y Motta para dos plazas, ya que la otra no se le discute a Deco.

Rijkaard, sin embargo, podría conceder a Márquez la posición de pivote defensivo y formar con Puyol y Thuram en el centro de la defensa, una apuesta de mayor contención para tratar de imponerse a la media madridista. Zambrotta y Sylvinho actuarían en las bandas.