Jiménez: "He terminado pidiendo la hora, pero que se preparen"

Actualizado: viernes, 16 mayo 2014 21:03

CALDES DE MALAVELLA (GIRONA), 16 May. (Del Enviado Especial de EUROPA PRESS, Rodrigo Trascasa)

El golfista español Miguel Ángel Jiménez ha reconocido que terminó "pidiendo la hora" este viernes en la segunda jornada del Open de España 2014, que se disputa hasta este domingo en el gerundense PGA Catalunya Resort, pero aconsejó a los primeros "que se preparen" porque el 'Pisha' está dispuesto a "destapar el bote de las esencias" de cara a un fin de semana en el que espera triunfar.

"He acabado pidiendo la hora. He jugado ramplón, no las he dejado cerca. Nos ha seguido mucha gente sí. Llevo sembrando 25 años. Lo bueno es que estamos en la pelea, a tres golpes de los líderes y queda mucha tela que cortar. Mañana destaparemos el bote las esencias y que se preparen, que viene el 'Pisha' echándoles el aliento en el cogote", señaló tras terminar una vuelta de viernes que le deja en dos golpes bajo par, a cuatro del líder Thomas Pieters.

Y es que, en el partido más atractivo del día, casi también lo fue el jueves, el golfista español tuvo que seguir el ritmo del holandés Joost Luiten y el italiano Francesco Molinari, que terminaron el día con tres y cinco bajo par respectivamente. Jiménez, que finalizó el viernes con uno sobre par, arrancó con dificultades y, a pesar de que logró tres 'birdies' casi consecutivos, terminó sufriendo para mantener el tipo ante el despliegue de sus dos compañeros de partida.

"He empezado con 'doble-bogey' en el uno. Fallé la calle y di un golpe pobre al búnker, se quedó mal, tenía la bola más baja que los pies y no conseguí sacarla. Después la dejé en green pero no metí el putt. He recuperado bastante bien con tres 'birdies', pero en el 16 he hecho tres putts para 'bogey'. Me dejé un putt muy difícil de unos 12 metros en bajada. Por mis nueve segundos he vuelto a hacer 'bogey' al seis", explicó sobre su vuelta.

Por otro lado, el malagueño destacó lo complicado de acertar con las banderas del campo de Caldes de Malavella, aunque se mostró encantado con el gran día que lució en Girona por la mañana de la segunda jornada. "El campo es exigente, las posiciones de bandera son delicadas, pero las condiciones de juego han sido perfectas esta mañana, ahora se está levantando algo de viento. Es difícil estar fino como una pera todos los días", indicó.