HAMELN (ALEMANIA), 29 Jun. (EP/AP) -
El defensa de la selección francesa Lilian Thuram se mostró muy satisfecho de haber vuelto a la internacionalidad, tras haber abandonado el combinado galo tras la Eurocopa de 2004 y haber aceptado la llamada del actual seleccionador Raymond Domenech hace un año.
"Fue en contra de mi voluntad. Pero ahora siento un gran placer de estar aquí y saboreo cada momento porque podría ser mi último (Mundial). Me siento muy afortunado de estar jugando en esta Copa del Mundo", apuntó el lateral francés.
Thuram, que sumará su internacionalidad número 119 frente a Brasil el próximo sábado en los cuartos de final, explicó que cuando regresó a la selección lo hizo con la intención de no repetir el fracaso de Corea y Japón.
"Cuando vine a esta Copa del Mundo pensé: "Esperemos que no pase lo mismo que en 2002". "De otro modo, habría tenido muchos problemas viviendo esa situación", añadió.
Thuram dudó de la dedicación de algunos jugadores franceses en la Eurocopa de 2004 y decidió dejar la selección tras caer eliminados por Grecia en los cuartos de final. "Puedes aceptar una derrota si estás feliz con el modo en que has jugado", aseguró el defensa.
Domenech convocó a Thuram para un amistoso frente a Costa de Marfil en agosto de 2005 y el lateral confesó que, desde entonces, estuvo meditando sobre su posible regreso.
"Hice todo lo posible por no volver a pasar por lo mismo después del Europeo de Portugal, pero ahora siento un enorme placer", concluyó.
