BUDAPEST, 1 Ago. (EUROPA PRESS) -
Erika Villaécija, que a las primeras de cambio se despidió de sus opciones de luchar por defender su cetro continental en los 800 libres, protagonizó la gran decepción para la natación española en la segunda jornada de los Campeonatos de Europa que se están disputando en Budapest.
La catalana, oro en Madrid hace dos años, estuvo muy por debajo de lo esperado y tan sólo pudo conseguir el décimo tiempo en las eliminatorias, que la dejaba fuera de las mejores y de unas aspiraciones a los metales.
La pupila de Jordi Fortuny, la gran esperanza de la natación española a un metal en Budapest, fue cuarta de su serie con un discreto crono de 8:44.19, lejos de los 8:36.34 en los que ya había nadado la distancia esta temporada.
El mejor tiempo para la final fue para la francesa Laure Manaudou, con 8:28.19, que pareció haber olvidado el fracaso de ayer con su eliminación en los 400 estilos.
LA LLUVIA OBLIGA A SUSPENDER LA JORNADA.
La lluvia, por su parte, se erigió en protagonista en la parte final de la jornada de tarde. Después de amenazar desde su inicio, cuando ya sólo restaban las semifinales de los 200 libres y la final de los 200 espalda, con protagonismo para la española Escarlata Bernard, el agua descargó sobre la piscina obligando a suspender las pruebas.
Bernard, de 17 años, contará así mañana con su oportunidad de medirse a la elite de la natación en su primera gran ocasión. La canaria se clasificó para la final con el cuarto mejor crono (2:12.58).
En las finales de la jornada que si que se pudieron disputar, en los 50 mariposa, el ucraniano Sergiy Breus no dejó lugar a dudas de que es el auténtico rey continental en la especialidad y se hizo con el oro, al igual que hace dos años en Madrid.
Con un crono de 23.41, Breus, bronce el año pasado en los Mundiales de Montreal, se quedó a las puertas de batir su récord de Europa (23.38). El podio lo completaron el croata Duje Draganja y el danés Jakob Andkjaev y el ucraniano Andriy Serdinov, que compartieron el bronce.
En la prueba femenina, el dominio fue total de las suecas, con Therese Alshammar y Anna-Karin Kammerling, actual plusmarquista mundial de la distancia, firmando un doblete con el oro y el bronce.
En los 100 espalda, también confirmó su supremacía el ruso Arkady Viatchanin, que batió en unos espectaculares últimos cincuenta metros al veterano austriaco Markus Rogan. La sorpresa negativa fue el húngaro Laszlo Cseh que ante su público sólo pudo ser sexto y se quedó fuera del podio.
Mientras, en los 100 braza, el oro fue para el ruso Roman Sludnov, con la plata para el noruego Alexander Dale Oen y el bronce para el ucraniano Oleg Lisogor.
