MADRID, 4 Ene. (EUROPA PRESS) -
La escudería Renault F1 Team ultima estos días la puesta a punto del RS26, que debutará en pista el próximo 10 de enero en el circuito de Jerez y con el que esperan desde el Gran Premio de Bahrein, prueba que abrirá el Mundial 2006, defender las coronas de pilotos del español Fernando Alonso y de constructores.
"Estas primeras carreras pueden ser cruciales. Cada victoria reporta diez puntos, pero es necesario tener en cuenta el aspecto humano. La primera victoria motiva a todo el equipo y permite aumentar la confianza", afirmó Pat Symonds, director ejecutivo de ingeniería de la escudería.
En 2005, el inicio de campeonato permitió a Renault tomar una importante ventaja con respecto al resto de sus rivales, por lo que en el conjunto galo, donde se ha trabajado intensamente en el banco de pruebas sobre el motor V8, saben que repetirlo será el reto para este nuevo curso.
"La aritmética tiene por bien decir que una victoria a principios de temporada es tan importante como al final de campeonato, pero en cuanto a la seguridad que proporciona, un éxito inmediato vale el 50% más", subrayó Symonds.
El 10 de enero en Jerez, cuando el italiano Giancarlo Fisichella estrene el RS26 supondrán el fin a un largo y minucioso trabajo de 18 meses y el principio a otro intenso en pista, con el objetivo de llegar al próximo 12 de marzo, fecha del GP de Bahrein, con el monoplaza más competitivo y fiable.
El equipo galo será el tercero en poner en marcha su coche para 2006, por lo que se beneficiará del tiempo suficiente para preparar su máquina. Además, dos chasis estarán disponibles desde la segunda sesión de entrenamientos del equipo, con el objetivo de realizar el mayor número de kilómetros posibles antes de la primera carrera.
