MADRID, 14 Jun. (EUROPA PRESS) -
La atleta española Mayte Martínez afirmó tras renunciar a los Juegos Olímpicos de Pekín por sus continuas molestias en el pie derecho, que vive "momentos duros", pues "tenía muchas ilusiones puestas, ya que si todo iba bien, se podía hacer un buen papel" en los 800 metros de la cita olímpica.
"Tenía muchas ilusiones puestas en Pekín, pues podía hacer un buen papel, por lo que la decisión ha sido difícil. Tratamos de aguantar hasta el último momento, para poder ir aunque no fuera al cien por cien, si al menos para poder competir, pero no estoy en unas condiciones mínimamente decentes de participar", lamentó la vallisoletana en declaraciones a Europa Press.
La pucelana, que tomó la decisión el pasado lunes tras someterse a nuevos test, explicó que "no tenía sentido forzar más, pues no había garantías de que las cosas cambiaran".
"Era lo mejor para el pie, porque me estaba sometiendo a sesiones maratonianas, analíticas, pruebas en la piscina y era frustrante ver como cada vez que pisaba el tartán los dolores no desaparecían, incluso se me estaban cargando los peroneos cada vez más y corría el riesgo de sufrir alguna lesión mucho más fuerte", defendió.
En este sentido, la atleta del CA Adidas reconoció que quizás "se corrió demasiado y se acortaron plazos que no fueron buenos en la recuperación". "A lo mejor nos pudo la ansiedad y corrimos demasiado, porque sí es cierto que las primeras sensaciones tras la operación fueron bastante positivas", advirtió.
"HA SIDO UNA LIBERACIÓN".
Una vez tomada la decisión, lo cual ha supuesto "una liberación" reconoció Martínez, la mediofondista española pasará "unos veinte días más en Valladolid, antes de coger unas vacaciones".
"Queremos irnos la primera quincena de julio fuera y así desconectar porque aquí la gente te conoce, te para, te pregunta y tú sigues dándole vueltas a todo, cuando vuelve probaré de nuevo y si los dolores persisten ya pensaremos a fondo qué decisiones tomamos", afirmó la castellano-leonesa.
Y es que esa inseguridad es lo que más obsesiona ahora a Mayte Martínez, pues "el no saber a ciencia cierta cuando estarás a tope es lo peor". "Nunca me han dicho exactamente qué es lo que tengo y esa inseguridad de saber cuando vas a estar bien, de no tener plazos, es lo que te va creando una agonía insoportable", explicó Martínez que afirmó tener desde hace tiempo "la corazonada de que no iba a poder viajar a China".
