MADRID, 19 Nov. (EUROPA PRESS) -
El tenista balear Rafa Nadal será una vez más el indiscutible líder del equipo español de Copa Davis que debutará este martes en las nuevas Finales de la competición que se están disputando en la Caja Mágica, escenario que ya le ha dado alegrías y donde espera alargar ese halo de ser casi invencible en el torneo por países.
Sólo un jugador puede presumir de haber batido en un partido individual de la Davis, el checo Jiri Novak, hace 15 años y cuando el de Manacor era señalado como una gran promesa. Desde aquél 6 de febrero de 2004 en Brno, nadie más ha hecho hincar la rodilla al balear en la competición, donde ha sido uno de sus principales estrellas.
Nadal, con 17 años y aún sin explotar, tuvo que acudir a la llamada del por entonces 'G-3' formado por Juan Bautista Avendaño, Jordi Arrese y Josep Perlas que hacían de capitanes, por las lesiones de Carlos Moy y Juan Carlos Ferrero, y las renuncias de veteranos como Albert Costa y Alex Corretja.
España había jugado la final de la Davis meses antes, cayendo ante Australia, y su inicio no era sencillo, ante una República Checa que tenía como líder a Jiri Novak, un jugador por entonces peligroso, y a Radek Stepanek como número dos, además de una superficie 'indoor' muy rápida y desfavorable para los intereses de la 'Armada'.
El de Manacor plantó cara, pero cayó en el primer punto ante su rival en tres sets (7-6, 6-3, 7-6). Sin embargo, desde esa derrota, nadie más ha podido derrotarle en la Copa Davis en sus siguientes 24 partidos de sus 18 eliminatorias disputadas, una racha que se pondrá a prueba con las novedades del nuevo formato y que se apoya principalmente en su fortaleza en tierra, donde tiene 19 triunfos, mientras que los otros son cuatro en pista rápida.
Además, y aunque ahora el nuevo formato de Kosmos y Gerard Piqué es al mejor de tres sets, en todo esta hoja de servicios en la Copa Davis, desde la derrota en su debut, sólo perdió cinco sets más y nunca llegó a jugar un partido a cinco mangas. Los estadounidenses Andy Roddick (2004) y Sam Querrey (2008), los italianos Andreas Seppi (2005) y Filippo Volandri (2006) y el argentino Juan Martín del Potro (2011), son los únicos que pueden presumir de arrebatarle un parcial en esta competición.
Los primeros en intentar poner fin a su condición de casi invencible será el ruso Karen Kachanov, 17 del mundo y un jugador muy agresivo. Sin embargo, el de Moscú nunca ha ganado al español en sus anteriores seis enfrentamientos, cinco en pista rápida, cuatro al aire libre y la hierba de Wimbledon.
El número uno ruso, además, sólo le ha quitado un set al mallorquín, en el US Open de 2018, donde puso en muchos aprietos a su rival, que también sufrió para derrotar al ruso en su último duelo, en el último Masters 1.000 de Indian Wells, donde se impuso en dos 'tie-breaks'. Kachanov, además, cuenta con tres títulos en 'indoor', todos ellos el año pasado: el Masters 1.000 de París-Bercy, Moscú y Marsella.
La experiencia de Nadal se contrapone a la menor de Roberto Bautista, el número dos del equipo. El castellonense, que ha vivido un gran año, tiene un balance de seis victorias y cinco derrotas en un total de siete eliminatorias.
El número nueve del mundo tendrá enfrente a otro joven pujante como Andrey Rublev, con 22 años recién cumplidos y de infausto recuerdo para España, ya que con sólo 17 dio a su país el quinto y decisivo punto ante Pablo Andújar en la pelea por jugar el 'playoff' para volver al Grupo Mundial. Bautista le ha ganado sus dos anteriores partidos, pero el moscovita ha dado un salto adelante en 2019 y hace unos meses ganó en la pista cubierta de su ciudad natal.
