MONTECARLO, 23 Abr. (EUROPA PRESS) -
El español Rafael Nadal dio la importancia que tiene al arrancar su temporada en tierra batida levantando por segundo año consecutivo el título en Montecarlo, tras derrotar además en la final al número uno del mundo, y afirmó que "a un triunfo así uno no se acostumbra nunca, sobre todo ante Federer".
"Es una victoria muy bonita. Es muy especial comenzar la temporada sobre tierra batida con un título. El partido fue muy duro, estaba muy decepcionado por haber dejado pasar mi oportunidad en el segundo set. Después, he pasado por momentos difíciles", indicó.
Aún así, el manacorí aseguró que "en el conjunto" estaba "muy satisfecho del partido, ya que estuve muy agresivo con la derecha, muy regular y concentrado a lo largo del encuentro".
Tan sólo puso un lunar en su actuación, el servicio, donde tuvo "un problema con la arena pero no es una excusa". "Al final del cuarto set, pensé por supuesto en el quinto set. Pero poca importancia tiene ganar en cuatro o cinco mangas. Entonces sabía que el trofeo estaba muy cerca. Hice el pequeño esfuerzo necesario para llegar a ello", añadió.
Respecto al hecho de haber sumado ya 42 victorias seguidas en tierra y acercarse a las marcas de Bjorn Borg y Guillermo Villas sobre esta superficie, Nadal dejó claro que hay que ir partido a partido.
"Ahora para superar a Borg, hace falta que llegue a la final en Barcelona. Esto no es fácil. Cada día, puedo perder, hasta sobre tierra. Bueno, si estoy al cien por cien, sé que tengo buenas posibilidades de ganar. Pero, francamente, muchos jugadores pueden batirme", afirmó.
FEDERER: "JUGAR CONTRA NADAL ME AYUDA A PROGRESAR"
Por su parte, el suizo Roger Federer, número uno del mundo, aceptó con deportividad su derrota y prefirió quedarse con las cosas positivas de su paso por Montecarlo ya que fue "una semana buena" para él.
"Di un gran paso adelante. Hoy, casi lo consigo y pienso que mis posibilidades de ganar en Roland Garros han subido después de esta semana. Jugar contra Nadal me ayuda a progresar", manifestó.
El helvético, que vio cortada su racha de 29 triunfos consecutivos en Masters Series, reconoció que hizo "un buen partido", aunque lamentó el no haber aprovechado "el número de ocasiones" de que dispuso, especialmente "en las bolas de break".
Federer, además, reconoció que el haber perdido en sus tres últimos enfrentamientos ante el español no es algo que le "desanime".
"Nadal no me deja elección, contra él hay que arriesgarse. Los que crean lo contrario, les propongo probar en mi lugar", declaró.
"¿Nadal demasiado fuerte para mí? No estoy de acuerdo. Me siento en igualdad con él. La ventaja únicamente pequeña que le concedo es que es zurdo y hay no muchos en el circuito", añadió sobre el manacorí.
Y es que el suizo subrayó que el jugar con zurdos no es algo "a lo que esté acostumbrado, esto explica en parte mi mal principio de partido". "Tengo a mi entrenador (Tony Roche) que es zurdo pero, bueno, es un poco viejo", bromeó.
