Es la primera francesa en hacerlo desde la mítica Suzanne Lenglen
WIMBLEDON (INGLATERRA), 8 Jul. (EUROPA PRESS) -
La francesa Amelie Mauresmo se adjudicó el triunfo en el torneo de Wimbledon, tercer 'Grand Slam' de la temporada, en un auténtico hito histórico para su país porque no veía a una de sus jugadoras levantar la Ensaladera desde el último de los seis conquistados por la mítica Suzanne Lenglen en 1925.
Mauresmo, contradiciendo a los que le acusan de aflojar en los momentos decisivos, hizo valer su condición de número uno para apuntarse el segundo torneo del 'Grand Slam' de su carrera, después del último Abierto de Australia, en el que impuso igualmente a Henin-Hardenne, quien se vio obligada al abandono por distintos problemas gástricos.
La jugadora gala impidió además a Henin, tercera cabeza de serie, que completara el 'Grand Slam'. A la jugadora valona, que cuenta en su haber con tres Rolang Garros, un Abierto de Australia y un Open de Estados Unidos, sólo le falta Wimbledon, donde ya perdió su primera final en 2001 ante Venus Williams.
Mauresmo terminó aprovechando los nervios y los errores de Henin-Hardenne, quien había comenzado el partido de manera arrolladora. Se anotó el primer juego del encuentro, rompiendo el servicio de la francesa y desde entonces tomó las riendas del primer set para romper de nuevo el saque de Mauresmo y redondear el triunfo parcial por 6-2.
Pero el guión cambió bruscamente porque Mauresmo hizo valer sus golpes de derecha desde el fondo, mostró mayor agresividad y aprovechó las jugadas de saque y volea para terminar doblegando la resistencia de la belga, que sufrió un bajón demasiado importante.
En el tercer set, el equilibrio fue mayor, pero Mauresmo se mostró más valiente que la valona, y aprovechó una rotura en el tercer juego para terminar decidiendo con su servicio su primera victoria en la 'catedral' del tenis.
