EDIZIONES, 25 oct.-18
La gestión de residuos es uno de los grandes problemas que tenemos los seres humanos. Un problema que nos afecta en la misma medida que afecta, y de manera grave, al medio ambiente. Es por ello por lo que cualquier iniciativa, por pequeña que sea, para tratar de solucionar ese problema puede sumar puntos en beneficio de todos.
Turquía, que se encuentra a la cabeza en producción europea de desechos plásticos y que cuenta con la tasa más baja de reciclaje de Europa, ha lanzado una curiosa iniciativa por la cual los viajeros del transporte público de Estambul podrán canjear billetes de metro por envases de plástico.
El proyecto, llevado a cabo por el Municipio Metropolitano de Estambul, consiste en la instalación de nuevas máquinas expendedoras de billetes diseñadas para detectar el material que se está reciclando y convertirlo en descuento para el trayecto de los usuarios. Por poner un ejemplo real, una botella de plástico de 0,33 litros equivaldría a 2 centavos (kurus), 6 centavos para una botella de 1 litro. Aquellos que más reciclen, mayores descuentos tendrán y hasta pueden conseguir un viaje gratis.
El objetivo está claro: fomentar y crear conciencia, por un lado, de la importancia del reciclaje, y estimular a los ciudadanos a utilizar el transporte público en aras de reducir también la contaminación ambiental.
De momento se han instalado 25 máquinas de este tipo a la espera de aumentar el número hasta 100 a finales de año.
