DESCONECTA, 13 Jul.
Molly Bair, de 17 años, mide 1,82 metros, tiene una larga cabellera rubia, grandes ojos azules y unas facciones prominentes que tanto le han causado burlas e insultos por parte de compañeros de instituto, como le han valido para obtener contratos de prestigiosas firmas internacionales de moda como Alexander McQueen, Balenciaga, Prada, Gucci o Chanel, después de que un cazatalentos se fijase en ella.
Considerada como una de las bellezas exóticas más populares de las pasarelas en la actualidad, Molly Bair no lo tuvo tan fácil en sus comienzos. Desde muy pequeña, Molly fue señalada allí por donde pasaba por sus peculiares rasgos físicos, hasta el punto de recibir constantes insultos y burlas.
'Niña rata', 'alienígena', 'gremlin' o 'duende' fueron algunos de los apodos descalificativos con los que muchos compañeros de instituto se referían a la joven Molly adolescente de hace un año. Desde entonces, y después de que un caza-talentos de la conocida agencia The Society Management la descubriera comprando en un mercadillo de verano, Molly Bair es uno de los rostros más rifados entre diseñadores, fotógrafos y revistas de moda.
Dos meses después de aquel fichaje, la 'niña rata' de la que muchos se burlaron comenzó a desfilar en Nueva York con Proenza Scouler y menos de un años después ha pisado la pasarela con 32 firmas diferentes, entre las que destacan Alexander McQueen, Karl Lagerfeld, Alexander Wang, Marc Jacobs, entre otras.
Antes de convertirse en modelo, Molly era una chica común y corriente de su edad a la que le gustaba pasar el tiempo libre practicando su deporte favorito: el tennis, tal y como declaró en una entrevista a CNN. "Nunca pensé que una chica que pasó la mayor parte de su infancia siendo uniceja, llevando gafas y camisetas de Yoda pudiera acabar en el Vogue italiano", confesó en la misma entrevista.
A sus 17 años, Molly sabe muy bien cómo era su vida hace a penas un año, antes de convertirse en modelo de pasarelas y tiene clara la teoría de que el mundo de las modelos no sólo son bellezas espectaculares -como las de Victoria's Secret: "somos una especie de comunidad de personas que siempre nos hemos sido 'extrañas' por ser demasiado altas o demasiado flacas", dijo Bair.
"Creo que ser modelo y estar a la moda me ha abierto los ojos a lo que es la belleza en general. Creo que la belleza realmente reside en las singularidades".
