PALMA DE MALLORCA, 14 Abr. (EUROPA PRESS) -
La feroz competencia asiática ha provocado que los fabricantes de piel y marroquinería de Baleares reduzcan sus ventas un 65 por ciento en los últimos dos años y que cuatro empresas isleñas de este sector hayan decidido echar al cierre al no poder competir en precios con los productos llegados desde Asia.
El descenso de ventas se debe a un retroceso en la demanda nacional provocado por la penetración en el mercado español de los productos asiáticos, bajos en calidad, diseño y precio, que han llevado a la "ruina" a empresas de las islas que no pudieron sobrevivir a la "feroz competencia".
En declaraciones a Europa Press, el vicepresidente de la Asociación de Empresarios de Marroquinería y Confección en Piel de Baleares, Tomeu Martorell, advirtió que la situación actual es "alarmante" porque la llegada "masiva" a España de productos de piel fabricados en India, Marruecos y China está frenando "muchísimo" la salida hacia el mercado nacional de los productos de Baleares.
"Sólo vendemos el 35 por ciento de lo que comercializábamos hace dos años. Los efectos son muy recientes y nos está costando mucho esfuerzo recuperar las cotas de antes", lamentó Martorell, para quien la única manera de sobrevivir es "apostando por la calidad y el diseño", aunque, advirtió, "si se proponen atraparnos en calidad, lo conseguirán".
La presencia de productos asiáticos en España ha tenido también efectos claros sobre las plantillas de las doce empresas de piel y marroquinería que persisten en la actualidad en Baleares, que en menos de diez años han pasado, en cifras globales y aproximadas, de 700 trabajadores a 60.
"La empresa más importante de piel de Mallorca redujo a la mitad su plantilla en los dos últimos años", destacó Martorell, sin dar nombres. "Sólo hay tres empresas muy fuertes en las islas, que sin embargo, también sufren los efectos de los productos de piel asiáticos", aseguró el vicepresidente de la Asociación y propietario, a la vez, de una empresas del sector.
Las tres empresas más sólidas y de mayor envergadura reciben subvenciones del Govern para que asistan a ferias internacionales donde promocionar sus productos y potenciar las ventas. En 2005, estas empresas recibieron una partida de 99.000 euros de la consellería de Trabajo y Comercio, que las llevó a participar en las ferias de Hong Kong, Tejas, Nueva York y Japón.
Estas empresas son las que soportan con menores dificultades el peso del mercado asiático, pero las más pequeñas son las que más notan el encarecimiento de la mano de obra, de las materias primas y demás obstáculos como el transporte de mercancías a la Península, que siempre se ve acrecentado por el factor de la insularidad.
En este sentido, Martorell aseguró que desde 2004 han cerrado sus puertas cuatro empresas de piel de Baleares, entre ellas, "una de las pioneras", aseguró Martorell, quien reconoce que la moda también influye en el descenso de las ventas de piel. "Ahora ya no se lleva tanto como años atrás, aunque si Asia inunda el mercado, volverá a crecer el interés por estos productos", apuntó.
Martorell recordó que la piel del cordero español es de las más buenas en calidad, aunque también de las más caras, y el poco rebaño que hay actualmente la ha encarecido todavía más. "Nos vemos abocados a comprar pieles de India y China, más baratas, aunque llegan sucias, por lo que debemos llevarlas a curtidoras de la Península para que sean limpiadas".
"Había una curtidora en Es Molinar pero cerró hace unos años", recordó el peletero, quien señaló que "al final, todo el proceso termina encareciendo los costes de producción, y nos vuelve a restar competitividad".
