MADRID, 16 Mar. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, afirmó hoy que la economía española "está fuerte y goza de buena salud", y expresó hoy su convicción de que las cuentas públicas reeditarán el superávit alcanzado en 2005 y de que se crearán un total de 700.000 nuevos empleos.
Zapatero, que asistió a la Quinta Edición de la entrega del premio "Empresas con Corazón", de Actualidad Económica-IESE, avanzó ante un aforo de empresarios que "el buen gobierno representa el equilibrio presupuestario. Lo hemos tenido por primera vez en 2005 y no tenemos ninguna duda de que lo tendremos en 2006", dijo.
Las Administraciones Públicas cerraron 2005 con un superávit de casi 10.000 millones de euros, el 1,1% del PIB, en términos de Contabilidad Nacional.
El presidente hizo un repaso de las principales magnitudes económicas y destacó, entre otros avances, que las empresas presentan unos resultados "claramente satisfactorios", que en 2005 hubo una revalorización bursátil del 20%, que se creó empleo y que se logró una tasa de paro "sin parangón" (8,7%) que sitúa al país en una "posición favorable para 2006 y 2007".
En este sentido, avanzó el propósito del Ejecutivo de seguir reduciendo a lo largo de 2006 la tasa de paro "y que la economía española pueda dar lugar a la creación de 700.000 nuevos empleos".
El jefe del Ejecutivo subrayó que la economía española "está fuerte y goza de buena salud", ya que crece a un ritmo del 3,5% del PIB, más del doble de la UE, y espera para 2006 mantener cifras de crecimiento superiores al 3%. Resaltó que sólo Finlandia "acompaña a España" en la zona Euro al presentar superávit fiscal.
También se mostró satisfecho con la confianza de las inversiones directas en España, que superaron los 15.000 millones en 2005, según datos de la balanza de pagos.
No obstante, asumió que a pesar de esta buena salud de las cuentas en España hay "dos frentes" en los que concentrar la actuación: reducir las tensiones inflacionistas y mejorar el saldo exterior.
El Presidente manifestó que el Gobierno desea un acuerdo en el diálogo social y en el sistema de protección social, de modo que "incorpore las reformas que garanticen su viabilidad en el futuro".
"Hay que asegurar en materia de Seguridad Social los próximos diez, quince ó veinte años", concluyó.
