Acciona promueve tres plantas de biomasa en Castilla y León, con una inversión de 140 millones

Actualizado: domingo, 28 octubre 2007 18:44


MADRID, 28 Oct. (EUROPA PRESS) -

Acciona Energía promoverá tres plantas de biomasa para la producción de electricidad en Castilla y León, con una potencia total de 55 MW y una inversión aproximada de 140 millones de euros, informó la compañía.

Una de las plantas está proyectada en Briviesca (Burgos), y podría estar en marcha en el segundo trimestre de 2009, en Valencia de Don Juan (León) y Almazán (Soria), que comenzarían a funcionar en el segundo semestre de 2010. Todas ellas contarán con participación del Ente Regional de la Energía (EREN) de Castilla y León.

En conjunto, las nuevas instalaciones producirán 440 millones de kWh, equivalentes al consumo doméstico 180.000 hogares de Castilla y León y crearán más de 300 puestos de trabajo, tanto directos como inducidos, en las propias plantas y en el sector de aprovisionamiento de la materia prima.

Acciona Energía cuenta ya con tres plantas de biomasa operativas en España que suman 33 MW. La más importante de ellas está ubicada en Sangüesa (Navarra) y cuenta con una potencia de 25 MW. Empezó a funcionar en pruebas en 2002 y produce 200 millones de KWh al año mediante la combustión de 160.000 toneladas de paja.

La compañía precisó que trasladará esta experiencia de varios años en la operación y funcionamiento de una planta de biomasa a las instalaciones ahora proyectadas.

BRIVIESCA, EL PROYECTO MÁS AVANZADO

La planta de Briviesca tendrá 15 MW de potencia y producirá 120 millones de kilovatios hora mediante la combustión de 98.000 toneladas de materia prima (un 80% de residuos herbáceos, fundamentalmente paja, y un 20% de residuos leñosos). El proyecto supone una inversión de 43 millones de euros y su construcción se iniciará a finales de 2007 o inicios de 2008.

La mayor parte de la materia prima provendrá de las provincias de Burgos y Palencia (en un radio de 75 kilómetros en torno a la planta), y en especial de la comarca de la Bureba, beneficiándose todas ellas de la puesta en valor de esta materia orgánica residual. Para ello se suscribirán contratos a largo plazo con agricultores, cooperativas y profesionales del sector.

Por su parte, la planta de Valencia de Don Juan, que supone una inversión de 55 millones de euros y producirá 200 millones de kilovatios hora, será la de mayor potencia (25 MW) y consumirá 160.000 toneladas de materia prima al año, con una distribución de la misma similar a la de Briviesca.

La mayor parte de la materia prima provendrá de las provincias de León, Palencia, Valladolid y Zamora en un radio de 100 kilómetros en torno a la planta. Por el Este, el radio de aprovisionamiento de la materia prima alcanzará casi el correspondiente a la planta de Briviesca por el oeste, lo que hará que casi toda la zona Norte de la Comunidad -Burgos, Palencia y León- sea potencial suministradora.

La planta de Almazán se ha proyectado con 15 MW de potencia y tendrá una mayor variedad de materia prima para la combustión, que procederá de residuos forestales y agrícolas por un lado y cultivos energéticos, por otro, en una proporción que variará a tenor de las tendencias en el suministro y la evolución del negocio. La planta supone una inversión de 42 millones de euros, y producirá 120 millones de kilovatios hora al año.

Dada la diversidad de aprovisionamientos y el diferente poder calorífico de los mismos, se necesitarán 117.000 toneladas de materia prima al año, con un radio de aprovisionamiento en torno a la planta de 75 kilómetros, que comprende la totalidad de la provincia de Soria, y algo de la de Burgos.

LA TECNOLOGÍA DE MENOR DESARROLLO

La compañía explicó que la biomasa para producción de electricidad ha sido, dentro de las tecnologías renovables, la que menos desarrollo ha experimentado en los últimos años en comparación con las expectativas previas.

En 1998, la biomasa contaba con 189 MW instalados en España, incluyendo el biogás y en 2004 sólo se habían alcanzado los 344 MW, pese a que el objetivo del Plan de Fomento de Energías Renovables aprobado en 1999 era alcanzar los 1.897 MW en 2010 y el más reciente Plan de Energías Renovables (PER), aprobado en 2005, prevé llegar al final de la década a los 2.039 MW.

El hecho de que en 2005 y 2006 se hayan instalado sólo 65 MW en total, hasta alcanzar los 409 MW, ha llevado al Gobierno a aprobar un aumento de las primas a la generación eléctrica por biomasa, un decreto que se cree posibilitará la materialización de nuevos proyectos, según la empresa.

Pese a su gran potencial en biomasa, Castilla y León tiene actualmente sólo 9 MW operativos para producción de electricidad en esta tecnología, situación que contrasta con su destacada en otras energías renovables, como la eólica y la hidráulica.