NUEVA YORK, 14 Ene. (del corresponsal de EUROPA PRESS, Emilio López Romero) -
Morgan Stanley y Citigroup cerraron este jueves un acuerdo definitivo para fusionar sus negocios de venta minorista de productos financieros, Global Wealth Management Group y Smith Barney, una operación valorada en 2.700 millones de dólares (unos 2.000 millones de euros al cambio actual) que permitirá a la nueva 'joint venture' convertirse en la mayor correduría del mundo.
En un comunicado conjunto, ambas compañías confirmaron que Morgan Stanley comprará el 51% de la unidad de corretaje de Citigroup por 2.700 millones de dólares. Además, precisaron que la entidad que preside John Mack podrá adquirir una parte adicional de Smith Barney dentro de tres años, aunque Citigroup seguirá teniendo una representación significativa en la nueva empresa durante cinco años.
La nueva correduría, mayor que la resultante de la unión de Bank of America y Merrill Lynch pasará a llamarse Morgan Stanley Smith Barney y contará con más de 20.000 agentes de bolsa en todo el mundo y manejará unos 1,7 billones de dólares en activos patrimoniales de sus casi siete millones de clientes cuando la operación sea cerrada en el tercer trimestre del año.
Los rumores acerca de la posible alianza entre dos de las grandes entidades financieras estadounidenses en el negocio de corretaje habían empezado a cobrar fuerza la semana pasada después de que el ex secretario del Tesoro Robert Rubin hiciera pública su intención de renunciar a su cargo como consejero senior de Citi.
Se espera que en el cuarto trimestre de su ejercicio fiscal Citigroup registre pérdidas netas de unos 6.000 millones de dólares (4.487 millones de euros), cuyos resultados serán publicados el 22 de enero. Sin embargo, las cuentas del grupo se verán beneficiadas por las ganancias extraordinarias de la venta de su negocio de banca minorista en Alemania, así como por la entrada de Morgan Stanley en Smith Barney.
De confirmarse, la entidad presidida por Vikram Pandit se anotaría su quinto trimestre consecutivo en 'números rojos' y elevaría las pérdidas de Citi en el conjunto de 2008 por encima de los 20.000 millones de dólares (14.965 millones de euros). De hecho, la entidad recibió 45.000 millones de dólares del plan de rescate de Wall Street aprobado por la Casa Blanca en septiembre pasado.
