Afirma que la "aseveración más acertada" en sus cinco años como ministro es que la salida a Bolsa de Bankia fue un "error"
MADRID, 15 Feb. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Economía, Industria y Competitividad, Luis de Guindos, ha recordado este miércoles en el Senado que él no era ministro cuando se produjo la salida a Bolsa de Bankia en julio de 2011, por lo que ha defendido que no se le puede "echar la culpa" del proceso de entrada de la entidad nacionalizada en el Ibex, al tiempo que ha dicho ver "importantísimo" que se cree una comisión de investigación para analizar el origen de la crisis financiera, la burbuja inmobiliaria y de crédito y el programa de asistencia financiera.
Así lo ha señalado De Guindos durante su comparecencia en la Comisión de Economía, Industria y Competitividad del Senado, para explicar las líneas generales de su departamento y el proceso de reestructuración bancaria, en particular la de Bankia, ante la petición unánime de explicaciones de todos los portavoces parlamentarios sobre el proceso de salida a Bolsa de Bankia y el proceso de reestructuración, así como sobre las imputaciones de esta semana de directivos del Banco de España y la CNMV.
"Me puede echar la culpa de muchísimas cosas, pero de la salida a Bolsa de Bankia no", ha respondido De Guindos al portavoz de Unidos Podemos en la Comisión de Economía del Senado, Ferrán Martínez Ruiz, quien ha criticado en su turno de intervención que las imputaciones de varios directivos del Banco de España y la CNMV por la salida a Bolsa de Bankia evidencia que las "negligencias" en el proceso las han pagado "de sus bolsillo" los contribuyentes y los accionistas de la entidad.
De Guindos ha recordado que él no era ministro cuando Bankia salió a Bolsa, sino a los pocos meses, cuando se nacionalizó, y que ha acudido ya en siete ocasiones al Congreso para hablar de la situación del sistema financiero español desde el rescate financiero en 2011, al tiempo que ha reiterado que en mayo de 2012 ya manifestó que la constitución de Bankia y su salida a Bolsa fueron un "error".
"Es seguramente la aseveración más acertada de los cinco años que llevo como ministro", ha recalcado Guindos, que ha recordado también que el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) ha trasladado a la Fiscalía especial contra la corrupción y la criminalidad organizada un total de 47 operaciones supuestamente irregulares de las entidades financieras que han recibido dinero público.
El titular de Economía ha dicho "aceptar" y "respetar" las últimas decisiones judiciales sobre el 'caso Bankia', y ha explicado que en el mundo han existido dos enfoques ante las crisis bancarias: la de cerrar los bancos, como en la Gran Depresión de Estados Unidos, o la última que considera que "no se puede dejar caer a un banco".
Asimismo, ha indicado que el decreto de provisiones aprobado en febrero de 2012 estableció limitaciones a las retribuciones de los bancos con ayudas públicas, que en algunos casos supuso una división por siete de los sueldos, y se eliminaron "todo tipo" de beneficios.
A este respecto, ha añadido que los principales acreedores de un banco son los depositantes, por lo que si un banco tiene un agujero "lo tendría que pagar el señor o la señora que tiene una cuenta corriente o una cartilla y habría que hacer una especie de afeitado a todos", algo que "aparte de injusto, generaría una caída de la confianza y el resultado sería la gran depresión".
En el caso de España, De Guindos ha precisado que, según el informe del Tribunal de Cuentas, se han inyectado 60.000 millones de euros, distribuidos en un tercio durante la época del Gobierno socialista y otros dos tercios restantes correspondientes al Gobierno del PP a través del rescate financiero.
VE "IMPORTANTÍSIMA" LA COMISIÓN DE INVESTIGACIÓN
Por ello, ve "importantísimo" crear una comisión de investigación en el Congreso para averiguar por qué en 2009 y 2010, cuando la prima de riesgo de España se situaba entre los 75 y los 100 puntos básicos, no se tomó la decisión de inyectar el capital, cambiar a los gestores de las cajas de ahorros, reestructurar, y modificar los gobiernos corporativos.
En su opinión, esa es la "gran pregunta" de la comisión de investigación, ya que si se hubiesen tomado esas decisiones se habrían evitado "quebraderos de cabeza" y un "montón de disgustos", al no haberse producido situaciones como las referidas a las preferentes o la salida a bolsa de Bankia.
El ministro ha defendido que tras cinco años desde el rescate financiero, el sistema financiero "no genera ningún tipo de incertidumbre", si bien ha insistido en que "sería buenísimo" contar con una comisión de investigación para ver el origen de la crisis, la burbuja inmobiliaria y de crédito y las consecuencias del programa de asistencia financiera.
