Hernández de Cos pide culminar el proceso de reducción de activos 'tóxicos' de la banca

Pablo Hernández de Cos
BANCO DE ESPAÑA - Archivo
Publicado: jueves, 19 julio 2018 14:38

Aboga por una revisión del esquema de financiación del Estado de bienestar y avanzar en la consolidación fiscal

MADRID, 19 Jul. (EUROPA PRESS) -

El gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, ve necesario que se complete el proceso de reducción de activos problemáticos de los balances de los bancos españoles, así como abordar el efecto del cambio regulatorio y mejorar los niveles de rentabilidad.

Así lo ha indicado el nuevo máximo responsable del Banco de España en su toma de posesión como miembro del Consejo de Estado, donde también ha hecho referencia a los que considera los principales retos a los que se enfrenta la economía española, como el elevado nivel de deuda pública, el desempleo o la financiación del Estado de bienestar.

"A pesar de los significativos avances de los últimos años, el sector financiero sigue enfrentándose a retos de calado", ha subrayado Hernández de Cos, en referencia a los activos tóxicos que aún pesan sobre los balances bancarios, los reducidos niveles de rentabilidad y a los "profundos" cambios regulatorios, tecnológicos y competitivos.

También ve necesario que se complete la Unión Bancaria a través de un mecanismo de respaldo financiero común para el Fondo Único de Resolución y mediante la creación de un Sistema Europeo de Garantía de Depósitos.

De igual forma, el gobernador ha asegurado que la economía española aún mantiene importantes elementos de vulnerabilidad, resaltando el "elevado" endeudamiento exterior, pues el nivel de deuda pública se sitúa cerca de máximos históricos, una tasa de desempleo que duplica los niveles de los socios europeos y el impacto del fenómeno del envejecimiento poblacional, que afecta sobre el sostenimiento de las finanzas públicas.

Hernández de Cos ha precisado que, a pesar de que la recuperación ha descansado en un conjunto diverso de medidas tanto nacionales como europeas, gran parte del impulso ha venido de la política monetaria extraordinariamente expansiva del Banco Central Europeo (BCE). "El efecto de estos impulsos tenderá a agotarse gradualmente en los años venideros", ha advertido.

Ante este contexto, ha indicado que será necesario ahondar en el proceso de consolidación fiscal, ya que los niveles de deuda perjudican las condiciones de financiación de la economía, limitan los márgenes de actuación contracíclicos de la política presupuestaria y obligan a dedicar un gran volumen de recursos al pago de la carga de los intereses.

"Existe margen para revisar la estructura de ingresos y gastos públicos, de forma que se mejoren su eficiencia y contribución al crecimiento, al mismo tiempo que se debe fomentar un mayor grado de corresponsabilidad fiscal en los distintos niveles de la Administración Pública", ha señalado el gobernador.

Por otro lado, continuar con la reducción del desempleo y su persistencia en determinados colectivos resulta un aspecto de "prioridad" para Hernández de Cos. Este elevado nivel de paro, según ha explicado, está muy relacionado con el notable aumento de la desigualdad que se ha producido durante la crisis.

REVISAR EL ESQUEMA DE FINANCIACIÓN DEL ESTADO DE BIENESTAR

Asimismo, con la vista puesta en el medio y largo plazo, uno de los principales desafíos a los que se enfrenta España y la mayoría de las sociedades desarrolladas es el envejecimiento de la población. En los próximos cincuenta años la población mayor de sesenta y cinco años, que actualmente supone menos de una quinta parte de los ciudadanos, pasará a representar más de un tercio, según las proyecciones del Instituto Nacional de Estadística (INE).

"Este fenómeno ejercerá --y ya lo está haciendo-- un efecto adverso sobre la tasa de actividad, de empleo y la productividad de la economía, y de manera muy singular sobre las finanzas públicas, elevando el gasto en pensiones, sanidad y en cuidados de larga duración", ha argumentado.

Por esto, el gobernador pide que se defina una estrategia "amplia y de miras largas", en la que además de revisar el esquema del Estado de bienestar y su financiación, con el objetivo de garantizar su sostenibilidad, se pongan en marcha políticas que incentiven la participación de los trabajadores en el mercado laboral u otras que fomenten la natalidad.

"Haciendo uso de mi recién estrenada condición de consejero, diría que el consejo rector sería evitar caer en la complacencia y, por el contrario, aprovechar la expansión económica para adoptar las medidas que permitan alcanzar un crecimiento sostenible, un mayor grado
de estabilidad y un margen de maniobra más amplio ante eventuales crisis futuras", ha concluido.