Economía/Fiscal.-El Gobierno y CiU se reunirán después de Semana Santa para abrir la negociación sobre la reforma fiscal

Actualizado: miércoles, 12 abril 2006 19:48

El Ejecutivo espera que el texto llegue al Senado a principios de junio para su aprobación definitiva

MADRID, 12 Abr. (EUROPA PRESS) -

El Gobierno y CiU se reunirán, previsiblemente, después de las vacaciones de Semana Santa para abrir la negociación sobre el contenido de la futura reforma fiscal que el Ejecutivo tiene previsto aprobar en junio, informaron a Europa Press fuentes parlamentarias.

En concreto, el vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes, y el portavoz nacionalista, Josep Antoni Duran i Lleida, protagonizarán el encuentro motivado por el proyecto de ley de Reforma Fiscal aprobado por el Consejo de Ministros el pasado 10 de marzo.

La iniciativa contempla que la rebaja de impuestos para el 60% de los contribuyentes sea del 17% y que el tipo marginal máximo baje 2 puntos hasta el 43%, repartiendo la tarifa en cuatro tramos, y añade que los instrumentos de ahorro (incrementos patrimoniales, depósitos bancarios, libretas de ahorro, seguros y dividendos) tributarán a un tipo único del 18%, medida con la que el Gobierno dice buscar "certidumbre y neutralidad" para favorecer la desaparición de la planificación financiero-fiscal.

En principio, la reforma fiscal pasará el primer 'filtro' del Congreso el próximo 11 de mayo, cuando se debatan y voten las enmiendas de totalidad contra el proyecto. Después pasará a Ponencia y a la Comisión de Economía para su aprobación en el Pleno del Congreso con vistas a su remisión al Senado.

Los principales objetivos de esta reforma, según el Ministerio de Economía y Hacienda, son la recuperación de la equidad en el tratamiento fiscal a todos los contribuyentes, la simplificación de los impuestos, la rebaja de la carga fiscal para las rentas salariales medias y bajas y el aumento de la productividad y el crecimiento económico.

Por su parte, CiU cree que la reforma fiscal propuesta por el Ejecutivo incorpora "una imagen inicial positiva" que se concreta en el incremento de la exención general y el de los mínimos personales y familiares, así como la introducción de una deducción por dependencia, el establecimiento de una exención de dividendos y participaciones en beneficios de hasta 1.000 euros por año y la reducción de los tipos impositivos máximos desde el 45% al 43%.

CONTRA EL AHORRO

Sin embargo, el mismo proyecto de ley incorpora, en opinión de la formación nacionalista, modificaciones que "perjudicarán gravemente a las personas con rentas medias, a muchas de las familias y a aquellas personas que trabajan y ahorran con la perspectiva del largo plazo, sea para la adquisición de una vivienda, como previsión para la vejez o para periodos de jubilación".

A su juicio, la reforma del Impuesto sobre Sociedades del Gobierno es "un verdadero despropósito" y tendría que ser capaz de aportar "competitividad al conjunto de la economía española". Desde su punto de vista, esta reforma debería tener "capacidad de atracción de actividad económica".

En este sentido, CiU opina que los tipos impositivos deberían ser "bajos" y los incentivos fiscales a la investigación, a la formación profesional, a la mejora del medio ambiente y a la internacionalización tendrían que "constituir un estímulo para las empresas dinámicas con capacidad de crecimiento y de creación de empleo".