Dirigentes de PSC e ICV destacan la importancia del apoyo sindical a la reforma estatutaria
BARCELONA, 1 May. (EUROPA PRESS) -
Miles de trabajadores --30.000 según los organizadores y 6.000 según la Guardia Urbana de Barcelona-- secundaron hoy la manifestación unitaria de Comisiones Obreras y UGT de Catalunya del Primero de mayo en Barcelona. Los sindicatos lanzaron varias reivindicaciones laborales y en materia de política industrial y aprovecharon la jornada para mostrar su apoyo al nuevo Estatut.
La marcha, bajo el lema 'Por la paz, el empleo estable y con igualdad', transcurrió en un ambiente festivo y reivindicativo entre el cruce de la Ronda Sant Pere con el Paseo de Gràcia de Barcelona y la Avenida de la Catedral, donde se hicieron los tradicionales parlamentos de los dirigentes sindicales.
En Girona, la marcha de CC.OO. y UGT de Catalunya congregó a 1.500 trabajadores, igual que en Tarragona, mientras que en Lleida se reunió un millar de personas.
Coscubiela aprovechó su intervención para hacer una valoración "globalmente positiva" del nuevo texto, puesto que contiene "muchas de nuestras aportaciones como sindicato", como el capítulo de derechos y deberes de la ciudadanía. También destacó la "mejora en materia competencial" y el nuevo sistema de financiación.
El secretario general de CC.OO. de Catalunya se dirigió a los críticos con el nuevo texto diciendo que los sindicalistas "sabemos que no hay nada más frustrante después de un proceso duro y complicado de negociación, en que has conseguido avanzar y ganar cosas, que adoptar una posición de melancolía reivindicativa".
ACABAR CON LA "CATALANOFOBIA Y BOICOT"
Su homólogo en UGT, José María Álvarez, también sostuvo que gran parte de las reivindicaciones del sindicalismo catalán han quedado "reflejadas en el texto" y pidió a los trabajadores "un esfuerzo para acercarnos al texto" y poder así "decidir en conciencia".
En este sentido, Álvarez cargó contra la "campaña de intoxicación, mentiras y falsedades" que, según él, "ha presidido el debate" sobre el Estatut. "No olvidamos los insultos y las calumnias del PP. Se debe acabar con la catalanofobia y el boicot", añadió entre aplausos de los manifestantes.
PSC E ICV DESTACAN LA IMPORTANCIA DEL APOYO SINDICAL A LA REFORMA.
Durante la manifestación, la portavoz del PSC en el Parlament, Manuela De Madre, reiteró sus críticas a ERC por su rechazo al texto y destacó la importancia de que los sindicatos apoyen la reforma, que aportará "instrumentos" para lograr un mejor mercado laboral.
El presidente de ICV y conseller de Relaciones Institucionales y Participación, Joan Saura, calificó de "magnífico" que los sindicatos apoyen el nuevo texto y recordó que ambas fuerzas "participaron de forma muy activa" en su elaboración.
CRÍTICAS A LA CEOE POR LA REFORMA LABORAL.
Por otra parte, Álvarez y Coscubiela trataron durante sus intervenciones materias como la precariedad laboral entre jóvenes, mujeres e inmigrantes, el cambio de modelo económico, el proceso de paz en el País Vasco, los conflictos de Irak y Palestina y el pacto para la reforma laboral, que coincidieron en calificar de insuficiente.
El secretario general de UGT de Catalunya consideró que es un acuerdo "importante", pero lamentó que no es "el que necesita el mercado laboral" porque la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) "lo ha hecho imposible" por "jugar más a la política" que a impulsar un cambio en el modelo productivo.
Coscubiela criticó que dicho pacto "se quedará corto" debido a la postura "recalcitrante sobre las cuestiones de fondo" por parte de los sectores empresariales.
POLÍTICA INDUSTRIAL.
Otro de los ejes de las reivindicaciones lanzadas por ambos dirigentes fue la política industrial de la Generalitat y el cambio del modelo productivo.
Coscubiela lamentó que "no aparece ningún indicio claro de renovación" del tejido industrial debido a la "cabezonería" patronal en favor de una estrategia competitiva "basada en bajos costes salariales, desregulación y precariedad" y un "conformismo institucional camuflado de postmodernidad del Gobierno catalán y especialmente de su presidente", Pasqual Maragall.
Álvarez dijo que hace falta "más y mejor" política industrial y propuso jubilaciones anticipadas para las mujeres del sector textil de más de 50 años, debido a la crisis que vive el sector y la falta de salidas profesionales para este colectivo
DERECHO DE VOTO DE LOS INMIGRANTES.
Por otra parte, los dirigentes de los principales sindicatos catalanes hicieron una mención especial a los inmigrantes y coincidieron en pedir que tengan derecho a voto.
Coscubiela lamentó que sean "utilizados como ejército de mano de obra barata", mientras que su homólogo de UGT afirmó que los únicos perjudicados por el proceso extraordinario de regularización del año pasado son "los empresarios especuladores que han estado explotando a los inmigrantes".
Ambos dirigentes sindicales también mostraron sus expectativas por la nueva Ley de igualdad, la ley de dependencia y el pacto nacional por la educación, así como por la entrada en vigor de un indicador de rentas básicas de Catalunya --que servirá como referente a la hora de establecer las pensiones no contributivas--.
Sin embargo, Álvarez calificó que "asignaturas pendientes" una mejora de la formación profesional y la lucha contra la siniestralidad laboral responsabilizando a los empresarios, y pidió un pacto nacional por la vivienda.
Coscubiela cargó contra la reforma del impuesto de sucesiones y donaciones, que en Catalunya "se negocia de manera clandestina con los 'lobbies' de las grandes fortunas familiares". "La izquierda no puede hacer una política fiscal idéntica o indistinta a la de la derecha", agregó.
USOC Y CGT TAMBIÉN SALEN A LA CALLE.
Por otra parte, la Unión Sindical Obrera de Catalunya (USOC) realizó una manifestación en solitario bajo el lema 'Por la calidad del empleo y la dignidad del trabajo'. La marcha comenzó en la Plaza Universitat de Barcelona y asistieron entre 300 --según la Guardia Urbana de Barcelona-- y 3.000 trabajadores --según los organizadores--.
La marcha de CGT, que comenzó entre la Ronda Sant Antoni y la calle Hospital, tuvo por lema 'Solidaridad y movilización' y congregó a medio millar de trabajadores, según explicaron a Europa Press fuentes de la Guardia Urbana de Barcelona. Los organizadores cifraron la asistencia en un millar de personas.
