Pide que no caer "en la tentación" de adoptar políticas que eviten el "ajuste" y apuesta por la moderación de márgenes empresariales
SEVILLA, 25 Sep. (EUROPA PRESS) -
El gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, reclamó hoy una actitud "más audaz" al Gobierno en sus reformas y a los agentes sociales a la hora de configurar los mecanismos de fijación salarial y funcionamiento del mercado de trabajo para lograr "una salida más rápida y sólida de esta fase complicada".
Fernández Ordóñez, que hoy pronunció en Sevilla una conferencia organizada por El Correo de Andalucía en colaboración con Iberdrola, se mostró en contra de las medidas "cortoplacistas" y demandó "reformas estructurales" en diferentes sectores, ya que éstas no sólo tienen efectos a medio y largo plazo sino también "pueden tener efectos favorables y significativos a corto plazo en la medida en que pueden mejorar la confianza de los agentes".
Animó a las autoridades a proporcionar unos incentivos "adecuados", lo cual, a su juicio, aconseja "no adoptar medidas presupuestarias discrecionales generalizadas y permanentes que intenten contrarrestar los efectos sobre familias y empresas de la inevitable reducción del gasto que exige el proceso de ajuste".
El gobernador del Banco de España consideró "esencial" el reforzamiento del control de los gastos corrientes de las administraciones públicas y apuntó que el actual sistema de negociación salarial "no es el más adecuado para evitar que la etapa de debilidad de la demanda genere un fuerte descenso del empleo".
LA CRISIS MÁS IMPORTANTE DESDE 1929.
En su intervención, donde fue presentado por el vicepresidente segundo de la Junta y consejero de Economía y Hacienda, José Antonio Griñán, y donde acudieron representantes económicos y políticos, Fernández Ordóñez, consideró se están registrando "unas turbulencias financieras que han alcanzado unas dimensiones que nadie pudo imaginar inicialmente", de forma que los acontecimientos de las últimas semanas sugieren que la economía internacional "está atravesando probablemente la crisis financiera más importante desde 1929".
A pesar de dicha situación, Fernández Ordóñez recordó que una parte del ajuste "es un elemento inevitable de la evolución económica, que permitirá corregir desequilibrios que se habían acumulado en la etapa de expansión".
En su intervención, seguida por centenares de personalidades, apuntó lo que, a su juicio, deben hacer los distintos agentes económicos durante la fase de ajuste macroeconómico, "pues no son sólo las autoridades quienes pueden ayudar a que nuestra economía recupere cuanto antes una senda de crecimiento elevado".
NO A LAS POLÍTICAS QUE TRATAN DE EVITAR EL AJUSTE.
En ese sentido, pidió que "no se caiga en la tentación de adoptar políticas que traten de evitar el ajuste, pues lo que conseguirían es que este se prolongase en el tiempo".
"Es esencial que los agentes económicos se adapten a las nuevas realidades, por dolorosas que estas sean", aseveró Fernández Ordóñez, quien consideró que "el objetivo no debería ser aislar la economía española y protegerla de las perturbaciones que hemos sufrido, sino facilitar el proceso de ajuste, permitiendo una alta flexibilidad en los cambios de los precios relativos --energía, costes laborales, márgenes-- y en la reasignación de recursos entre sectores".
Tras destacar el favorable punto de partida en España desde la perspectiva presupuestaria, que "ha evitado subidas impositivas que habrían amplificado la intensidad del ajuste", apuntó que la desaceleración del gasto "está afectando a la recaudación impositiva, reduciendo el saldo presupuestario, por lo que hay que extremar la prudencia en las decisiones fiscales y presupuestarias".
RECOMPOSICIÓN DE ACTIVIDADES PRODUCTIVAS.
Asimismo, abogó por una "recomposición" de las actividades productivas, para lo que "es esencial contar con una estructura de mercados de bienes y factores flexible y competitiva", ante lo que incidió en la necesidad de "acometer reformas estructurales", tras lo que citó una serie de sectores con necesidad de reforma, como la mejora de entorno competitivo de las cadenas de distribución de mercancías y la prestación de servicios, y campos como correos, transporte ferroviario, puertos, aeropuertos o energía, "que permitan un mayor protagonismo del sector privado y de la competencia".
En el sector inmobiliario, Fernández Ordóñez apuntó una serie de medidas, como mejorar la regulación del alquiler de vivienda "para hacerlo más flexible, rentable y atractivo, que permitiría atender la demanda de servicios residenciales y reactivaría la inversión inmobiliaria". Demandó además que se proporcione "seguridad jurídica" a los propietarios de viviendas y se liberalicen los plazos de los contratos para impulsar el alquiler.
También demandó una reforma del mercado de trabajo, "que será la clave para determinar si la actual fase de ajuste va a ser rápida y poco profunda o, por el contrario, intensa y prolongada".
En cuanto al papel de las empresas, tras reconocer que estas sociedades "van a vigilar al máximo la eficiencia en la gestión de sus procesos productivos" y se verán obligadas a "una revisión del consumo de energía utilizado", apuntó que, para afrontar el actual período, las empresas "están revisando su estrategia de crecimiento", por lo que "es necesario que las empresas puedan reorientar su actividad de forma flexible, sin trabas a la creación de empresas".
PIDE A LAS EMPRESAS QUE MODEREN MÁRGENES.
Además, consideró que la actual situación "va a exigir a las empresas una política de fijación de precios moderada, reduciendo sus márgenes", y también abogó por impulsar la internacionalización de las empresas y por una apuesta por la innovación y la calidad.
Resaltó la importancia de "poner en marcha los mecanismos que permitan limitar el aumento de los costes e incrementar las ganancias de productividad", un comportamiento moderado de los costes "que exige una respuesta responsable" por parte de empresarios y sindicatos.
"La presencia predominante de cláusulas de revisión ligadas a la inflación en los convenios colectivos es un problema que se convierte en especialmente nocivo cuando la inflación ha aumentado a causa de un choque externo y en un momento de debilidad", apuntó el gobernador del Banco de España, quien consideró que la presencia de esas cláusulas de revisión salarial ligadas a la inflación "empeora la capacidad de las empresas para competir y seguir creando empleo, genera inflación y entorpece esta adaptación".
PAPEL DE LAS FAMILIAS.
Por último, se refirió a las familias, a las que pidió "adaptación a los cambios", lo cual "exige, sobre todo, un mayor esfuerzo de formación, de capacitación profesional y de versatilidad", y les pidió que "incorporen a su comportamiento cotidiano cuestiones como el ahorro de energía".
A pesar de la situación actual, Fernández Ordóñez transmitió un mensaje de confianza sobre la capacidad de crecimiento de la economía española, "pues las bases productivas del país son mucho más sólidas que en el pasado y se ha producido un proceso de equiparación con la renta media europea que difícilmente será reversible".
