BRUSELAS, 11 Dic. (EUROPA PRESS) -
El vicepresidente de la Comisión Europea para el Euro y el Diálogo Social, Valdis Dombrovskis, ha asegurado este martes que es "crucial" que los líderes europeos respalden en la cumbre de esta semana las reformas de la eurozona pactadas recientemente por los ministros de Finanzas (Eurogrupo), al tiempo que ha confiando en que acerquen sus posturas sobre en futuro presupuesto para la moneda única.
"Es crucial que los líderes alcancen un acuerdo significativo esta semana (...) Los próximos meses serán decisivos para hacer que la eurozona sea más fuerte y sólida para todos los europeos", ha expresado el letón ante el pleno del Parlamento Europeo en Estrasburgo (Francia).
El vicepresidente del Ejecutivo comunitario ha reconocido que las reformas acordadas por el Eurogrupo no son "gigantes", pero ha defendido que no por ello son "menos importantes". "El debate no fue fácil, pero los resultados demuestran la voluntad sobre la mesa para encontrar soluciones que funcionen para nuestros desafíos comunes", ha subrayado.
Dombrovskis ha destacado que se ha conseguido avanzar en muchos temas, en particular en la reforma del fondo de rescate europeo --el Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE)-- y en la creación de un fondo de emergencia para la Unión Bancaria ('backstop', en jerga comunitaria). Pero también ha lamentado la falta de acuerdo sobre la incorporación de un mecanismo de estabilización en momentos de crisis.
"Celebro la disponibilidad del Eurogrupo para trabajar en instrumentos presupuestarios de competitividad y convergencia. Desafortunadamente, hay menos consenso sobre instrumentos para la estabilización, que también son esenciales", ha dicho.
En este sentido, Dombrovskis ha confiado en que los jefes de Estado y de Gobierno acuerden "avances y directrices" sobre este eventual presupuesto de la eurozona. El letón ha señalado que las propuestas de Bruselas para este instrumento deben ser la base del debate, pero se pueden complementar con el planteamiento franco-alemán y las ideas de otros socios del euro.
Por último, ha admitido que la puesta en marcha de un fondo único de garantía de depósitos (EDIS) es "la parte más difícil", así como que "se han conseguido pocos avances", pero también ha remarcado que se ha progresado lo suficiente en la reducción de riesgos del sector bancario como para empezar los debates políticos sobre su creación.
