PARIS, 15 May. (EUROPA PRESS) -
La economía francesa creció un 0,6% en el primer trimestre de 2008 respecto al último trimestre de 2007, una cifra mejor de la prevista, y tres décimas superior al trimestre anterior (0,3%), según los datos publicados hoy por el Instituto nacional de estadística y estudios económicos (Insee).
Además, se ha revisado al alza en dos décimas el crecimiento para 2007, fijado ahora en el 2,1% en lugar del 1,9% previsto anteriormente. La actividad económica muestra, no obstante, una ligera desaceleración si se compara con 2006, año en el que el crecimiento alcanzó el 2,4%.
Según el Insee, la demanda interna sigue siendo el motor del crecimiento francés, el consumo se mantiene fuerte y la inversión dinámica, pero la ralentización de las exportaciones pesa sobre el crecimiento, mientras que las importaciones muestran mayor dinamismo.
El poder adquisitivo de los hogares franceses gana fuerza y la tasa de ahorro aumenta, al igual que el margen de las sociedades no financieras, que crece moderadamente.
No obstante, el gasto de los hogares en el primer trimestre se ha ralentizado y creció un 0,1% frente al 0,6% del trimestre precedente. También el gasto en el sector inmobiliario nuevo se ha visto afectado por la desaceleración y ha pasado del 0,8% al 0%.
Las exportaciones han remontado hasta el 3,1% después de registrar una caída del 0,2% en el último trimestre de 2007 y las importaciones aumentaron un 1,9% (tras una caída del 1,1%).
El saldo comercial contribuye en 0,3 puntos a la evolución del PIB, como ya lo hizo a finales del año pasado. El Insee confirma igualmente un déficit presupuestario del 2,7% del PIB para el año 2007 y revisa a la baja la deuda pública, que se sitúa en el 63,9%.
MANTENER EL RUMBO.
El presidente francés, Nicolas Sarkozy, se felicitó de las cifras del crecimiento que, a su juicio, "trasladan el impacto de las medidas aplicadas y los compromisos del Gobierno a favor del trabajo, el empleo y el poder adquistivo".
En un comunicado, el jefe del Estado francés sostiene que los resultados de 2007, así como las estimaciones para el primer trimestre de 2008, "se ajustan a las previsiones del Gobierno a pesar de un contexto internacional difícil".
"El diagnóstico sobre la situación de nuestro país y los remedios que hay que darle se han visto reafirmados. Liberalizar el trabajo, modernizar la economía, invertir en el futuro, la participación de los trabajadores en el resultado de sus empresas y saneamiento de las cuentas están en el corazón de la estrategia económica. Los resultados publicados hoy demuestran la necesidad de mantener el rumbo", argumenta Sarkozy.
