Los Presupuestos podrían ser rechazados por cuarta vez en la historia de la democracia
MADRID, 2 Dic. (EUROPA PRESS) -
La Comisión de Presupuestos del Senado debatirá y votará este jueves los cinco vetos que han presentado PP, CiU, ERC, ICV y BNG al proyecto de Presupuestos del Gobierno, que finalizó hace una par de semanas su tramitación en el Congreso.
Las cinco formaciones han justificado su rechazo a las cuentas públicas por la congelación de las pensiones prevista para el próximo año y la irrealidad de las previsiones macroeconómicas presentadas por el Ejecutivo, que hace temer a estos grupos nuevos planes de ajuste, tal y como ha ocurrido en 2010.
La aritmética parlamentaria da la victoria a los vetos, puesto que se necesitan 14 votos a favor en Comisión para que prospere uno de ellos. El PP cuenta con 12 votos, a los que habría que sumar un voto de CiU y otro de los senadores nacionalistas.
En este contexto, el Grupo Parlamentario Socialista ha tendido la mano a los catalanes para evitar un veto en la Cámara Alta, lo que podría hacer que no prosperara ninguna de las cinco enmiendas y que se empezaran a negociar enmiendas parciales.
Sin embargo, fuentes de CiU han señalado a Europa Press que, previsiblemente, apoyarán los vetos, ya que el Gobierno está condicionando la negociación al apoyo de la formación a la congelación de las pensiones, unas de las líneas rojas que los catalanes no parecen estar dispuestos a cruzar.
De ser así, el veto que prosperaría sería el del BNG, puesto que es el primero que se debate y se vota en Comisión, donde las enmiendas a la totalidad se votan necesariamente de menor a mayor.
Una vez que el veto de los gallegos prosperara, el texto sería enviado al Pleno del Senado, donde las cinco formaciones tendrían que defender una vez más sus enmiendas la semana del 13 de diciembre.
En este caso la votación es diferente, aunque la aritmética parlamentaria vuelve a dar la victoria a los vetos, ya que los 123 escaños de PP, los siete de CiU, los cuatro de ERC, los dos de ICV y el del BNG suman 137 escaños, lo que supera por cinco senadores la mayoría absoluta requerida para que prospere el rechazo a las cuentas.
Si no hay sorpresas y prospera alguno de los vetos en el Pleno, las cuentas podrían ser rechazadas por cuarta vez en la historia de la democracia, por lo que volverían al Congreso tal y como salieron de allí para ser definitivamente aprobadas antes de que acabe el año.
NUEVO GOLPE A LA CONFIANZA
El veto del Senado no tiene efectos prácticos, aunque podría suponer un nuevo varapalo político para el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero en un momento en el que la confianza es crucial para la economía española, ya que el país está en el punto de mira de los mercados.
Las primeras cuentas que fueron rechazadas por la Cámara Alta fueron las de 2005, las primeras que elaboradas por el Gobierno socialista. Desde entonces, han sido vetadas en dos ocasiones más (las de 2008 y 2009), años en los que España ya se encontraba inmersa en una crisis económica que aún no ha superado.
