BEIJING, 25 Mar. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno chino ha hecho público un plan con el que pretende cumplir los objetivos medioambientales que se había marcado para este año y por el cual destinará un 78 por ciento más a proyectos relacionados con la reducción de emisiones contaminantes y el uso de energías limpias.
De acuerdo con un comunicado del Ministerio de Finanzas, del que se hace eco la agencia oficial Xinhua, el gasto total en estos campos pasará de los 23.500 millones de yuanes (2.145 millones de euros) en 2007 a 41.800 millones de yuanes (unos 3.800 millones de euros) este año.
Del total, 27.000 millones de yuanes provendrán de "fondos especiales" y los 14.800 millones restantes de la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma, máximo organismo chino encargado de establecer las políticas económicas del país.
Parte del dinero (4.000 millones de yuanes) se destinará a cerrar centrales térmicas que usan como fuente de energía el carbón así como plantas siderúrgicas. Algo más (5.000 millones) irá a parar a proyectos para limpiar las aguas de ríos y lagos, y 7.500 millones se emplearán en proyectos de ahorro de energía, entre los que se incluye la transformación tecnológica de ciertas industrias, la búsqueda de sustitutos del petróleo o la implantación de bombilla de ahorro energético.
El país asiático se había marcado para este lustro un ambicioso plan de reducción de la contaminación y el consumo energético, que de momento no está cumpliendo. La idea es lograr que caiga en un 20% el consumo de energía necesario para producir una unidad de su PIB (Producto Interior Bruto). Algunas de las emisiones más contaminantes deberán reducirse en un 10%.
Como parte de este intento por garantizar la aplicación de las normas medioambientales, el Parlamento chino aprobó este mes la creación de varios "súper ministerios" encargados de centralizar y organizar competencias y que incluyen uno encargado de la protección medioambiental, hasta ahora inexistente.
