Carlos Martínez: "Si el sector público se paraliza, el privado se ralentiza y crea menos empleo"

Carlos MArtínez, director general de IMF Business School
IMF
Actualizado: jueves, 2 junio 2016 11:39

MADRID, 5 May. (EDIZIONES) -

Las dos últimas semanas han estado protagonizadas por datos de empleo: la Encuesta de Población Activa y los datos del paro y afiliación a la Seguridad Social del mes de abril. En el contexto de incertidumbre política que se está viviendo, entrevistamos a Carlos Martínez, director general de IMF Business School, para que nos dé su valoración de las últimas cifras de contratación y desempleados, y cómo considera que evolucionarán en el futuro.

- El dato del paro de este mes nos aproxima a los 4 millones, barrera que llevamos casi 6 años sin romper. ¿Esta tendencia provocará que en mayo bajemos de esta cota?

Seguro, empiezan las contrataciones de la temporada estival y probablemente se creen más de 100.000 puestos de trabajo, esto hará que el número de desempleados se quede alrededor de los 3,9 millones, lo que sería positivo para el país.

- Abril es, históricamente, un mes favorable a la hora de reducir el nivel de desempleo. ¿Hasta qué punto se pueden mirar estos datos de forma optimista teniendo en cuenta la estacionalidad?

Con la estructura que tiene nuestro tejido productivo y siempre que el motor del empleo sea el sector servicios, esta tendencia no cambiará. En cualquier caso, los datos de abril han sido mejor de lo esperado. No olvidemos que este año la Semana Santa ha recaído íntegramente en el mes de marzo y esto pronosticaba unos datos menos positivos en el mes de abril.

En cualquier caso, con un crecimiento del 0,8% del PIB en el primer trimestre del año, tendríamos un problema de mucho más calado si los resultados hubiesen sido negativos, significaría que prácticamente estaríamos avocados a un paro estructural de aproximadamente el 15%.

- En términos interanuales, los menores de 25 años es uno de los sectores en los que más ha retrocedido el desempleo. ¿Es este uno de los primeros indicadores de la mejora de la situación de esta franja de edad?

Todas las medidas fiscales y laborales que se han tomado para favorecer el empleo de los jóvenes están dando resultado. En este caso, resulta de especial relevancia los contratos para la formación y el aprendizaje y los de prácticas, que durante el año 2015 aumentaron de forma significativa y que se consolidan en el 2016. Además, cada vez hay más jóvenes que se animan a crear empresas atraídos por las ventajas fiscales y de financiación.

- El peso de los contratos fijos sigue siendo mayor que el de los de parciales. Sin embargo, ambas cifras (84 mil y 61, respectivamente) siguen estando muy lejos de los de carácter temporal, que superan los 1,3 millones. ¿Esta tendencia continuará debido al carácter estacional histórico del empleo español?

Sin duda, mientras en nuestro tejido productivo tenga el sector servicios el peso que tiene en la actualidad, nada va a cambiar. Si no emprendemos reformas que ayuden a otros sectores productivos (igual que se hace con el automóvil) corremos el riesgo de que nos pasemos los próximos 10 años con un mercado laboral totalmente estacional y con tasas de paro superiores al 15%.

- ¿Cuáles serían las medidas a implementar para conseguir que la contratación indefinida despunte?

Desde mi punto de vista, todo pasaría por un contrato único. Actualmente en España, tenemos trabajadores de primera con contratos indefinidos que se encuentran en una situación de súper protección y que saben que son caros de despedir y, algunos de ellos, pasan a una situación de cierto acomodamiento y, por otro lado, tenemos trabajadores que sólo encadenan contratos temporales y que viven en un continuo estado de precariedad laboral, es mas en muchas ocasiones, cuando el empresario se ve obligado a reducir plantilla y tiene que despedir a algún trabajador, no lo hace por criterio de productividad o eficacia, sino que despide a quién más barato le sale. Sin duda, esta dualidad del mercado se acabaría con este contrato único, que además mejoraría nuestra competitividad.

- Hace tan solo una semana se publicaban los datos de la EPA y uno de los datos más reseñables era que los hogares con todos sus miembros en paro subían hasta los 54.300. ¿Qué ayudas se podrían impulsar desde el Gobierno para evitar esta situación?

Esta situación sólo se soluciona con unas políticas activas de empleo adecuadas (no como se ha venido haciendo hasta ahora con la formación ocupacional y que ha dado lugar a tantas corruptelas), es decir, tenemos que invertir en los colectivos más desfavorecidos, formándolos y dándole competencias que realmente demande el mercado de trabajo y que les permita acceder a un puesto de trabajo. Más que darles subvenciones (que de momento parece inevitable para evitar casos de pobreza extrema), deberemos darle los medios para que salgan de esa situación.

- La convocatoria de nuevas elecciones abre otro nuevo periodo de incertidumbre en la política que, de una u otra manera, afectará a los mercados, ¿cómo influirán estos dos nuevos meses con gobiernos en funciones al empleo?

Es evidente que pasará factura, por un lado, esta incertidumbre hará que inversiones, contrataciones, etc. esperen a que se despeje el panorama político para tomar decisiones. Además no olvidemos que la empresa que más contrata en España al sector privado es la Administración Pública y si está paralizada, el sector privado se ralentiza y crea menos empleo.