MADRID, 7 Ago. (EUROPA PRESS) -
La valoración de 230 millones de euros que Alza Real Estate dio a los activos aportados a su fusión con Urbas y Aldira Inversiones Inmobiliarias corresponden a una valoración "provisional", que será revisada por un experto independiente, según ha señalado la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
En respuesta a un requerimiento del supervisor bursátil, la inmobiliaria indica que la valoración de su filial Alza Residencial es una valoración provisional realizada por el administrador único de la sociedad, "partiendo desde el valor teórico contable" de la sociedad y teniendo en cuenta el efecto que tiene en dicha valoración una serie de transacciones realizadas con posterioridad al cierre del ejercicio 2013.
Así, la compañía señala que este valor, como establece la ley, será revisado por "un experto independiente designado por el registrador mercantil a tal efecto". Para estimar el importe de 230 millones de euros, el administrador único se basó en las valoraciones de que disponía el grupo a cierre del ejercicio 2013, añade.
Alza Real Estate precisa que "no es posible determinar taxativamente el porcentaje final" que adquirirá de Urbas en la fusión, aunque si se confirman las valoraciones del experto independiente, la participación final "se situaría por debajo del 30%".
Asimismo, la inmobiliaria indica que, a 31 de diciembre de 2013, cuenta con deudas con entidades de crédito por importe de 106,85 millones de euros que se encuentra vencida y en proceso de renegociación para su refinanciación, y deuda con entidades financieras por 26,45 millones de euros con vencimiento durante el presente 2013.
FUSIÓN CON URBAS.
El pasado mes de junio, Urbas alcanzó un acuerdo para fusionarse con Alza Residencial y Aldira Inversiones Inmobiliarias con el fin de constituir un grupo inmobiliario de "tamaño relevante y diversificado", con un capital social "superior" a los 300 millones de euros.
Urbas enmarcó estas operaciones en el proceso de reestructuración que lleva a cabo la compañía y en su objetivo de "constituir un grupo inmobiliario de tamaño relevante y diversificado que permita obtener sinergias tanto en la gestión como en eficiencia de costes".
Según destalló la compañía, Alza Residencial, filial de Alza Real Estate, cuenta con un valor de 230 millones de euros, mientras que el correspondiente a Aldira Inversiones se cifra en 120 millones de euros.
En virtud de la operación, Alza Real Estate se convertirá en accionista de Urbas Grupo Financiero y canalizará a través de esta firma sus actividades de promoción inmobiliaria.
Respecto a Urbas, en paralelo a la ampliación de capital por la que absorberá a las dos inmobiliarias, prevé abordar una segunda ampliación de capital, en este caso dineraria, por un importe mínimo de 50 millones de euros y abierta a todos los accionistas.
Los recursos que se capten con esta emisión se destinarán a reforzar los recursos propios de la compañía, a reestructurar su deuda y a financiar actividades de desarrollo inmobiliario.
