Economía/Empresas.- Toshiba cierra la compra de Westinghouse por 4.500 millones

Actualizado: lunes, 6 febrero 2006 21:03

LONDRES, 6 Feb. (EUROPA PRESS) -

El grupo tecnológico japonés Toshiba ha cerrado la compra de Westinghouse --filial en Estados Unidos del grupo de energía nuclear estatal británico British Nuclear Fuels (BNFL)-- por 5.400 millones de dólares (4.500 millones de euros) tras un proceso de subasta, anunció hoy la cadena británica BBC.

Tras la adquisición, la compañía japonesa venderá parte de Westinghouse a inversores minoritarios hasta reducir su presencia al 51%, con lo que mantendrá una posición de control en uno de los negocios con los que aspira a convertirse en "una empresa global en el negocio de la energía nuclear".

El director ejecutivo de BNFL, Mike Parker, consideró que la operación permitirá a Westinghouse competir de forma más eficaz en el mercado estadounidense. La oferta de Toshiba fue considerada la más atractiva, al incluir un desembolso tres veces superior al precio de partida, con lo que superó en la subasta a General Electric y a Mitsubishi Heavy Industries.

Según publicó recientemente 'Financial Times', Toshiba podría invitar tras la adquisición a un socio estadounidense, probablemente el grupo de ingeniería Shaw, a tomar una participación minoritaria en el grupo resultante.

En la actualidad, Toshiba ya diseña y construye plantas nucleares en Japón, pero no cuenta con infraestructura de expansión en el extranjero dentro de este negocio. La compra de Westinghouse fortalecerá precisamente sus opciones de ganar nuevos contratos en el exterior.

Westinghouse fue adquirido por BNFL por 1.100 millones de libras (1.600 millones de euros) en 1999. En la actualidad emplea a 9.000 personas y cuenta con unas ventas de cerca de 1.800 millones de dólares (2.600 millones de euros).

Esta operación se produce en un momento en el que los países occidentales reabren el debate acerca del uso de la energía nuclear para contratastar la excesiva dependencia de otras fuentes energéticas como el gas y el petróleo procedentes del exterior. Junto a esto, el Tesoro británico espera obtener con la venta de su participación en la compañía unos ingresos inesperados.