Trasladan al ministro que el sector de la alimentación está viviendo el peor año de la crisis
MADRID, 24 Jul. (EUROPA PRESS) -
Los representantes empresariales de compañías de gran consumo han respaldado esta tarde públicamente al ministro Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, en su decisión de no subir el IVA en el marco de la reforma fiscal.
Los máximos responsables de algunas de las empresas integradas en Aecoc como Campofrio, Nestlé, El Corte Inglés, Carrefour o Ahorramás han advertido en representación de la industria a los organismos internacionales de que un cambio en esta decisión haría "descarrilar la recuperación económica".
Entre otros, acudieron a esta cita el presidente del Suroeste Europa para Pepsico, Xavier Orriols; el presidente de J.García Carrión, José García Carrión; el consejero delegado de Campofrio, Fernando Valdés; el director general de Mahou San Miguel, Alberto Rodríguez-Toquero; y el gerente de El Corte Inglés, Juan Miguel Paret. También estuvieron representantes de Aecoc, Asedas, Fiab, Aces, Anged y Fehr.
El presidente de Aecoc, Francisco Javier Campo, se ha mostrado contundente y ha advertido de las consecuencias que hubiera tenido para el sector. "Haber subido el IVA hubiera hecho descarrilar la recuperación económica y además habría hundido al gran consumo, que es un sector clave para la salida de la crisis", ha indicado.
"Por ello las empresas del gran consumo y las asociaciones que las representamos queremos agradecer al Ministerio de Hacienda que desde el principio se haya mostrado abierto al diálogo en la elaboración de la reforma fiscal y se haya escuchado tanto a los agentes sociales como a los representantes empresariales".
INCENTIVAR EL CONSUMO
Campo ha resaltado que este encuentro llega para trasladar a Montoro el apoyo incondicional del sector a su decisión de no tocar el IVA y hacer valer ante los organismos internacionales que España "ya está demostrando que las medidas tomadas empiezan a dar sus frutos".
Los empresarios de la industria del gran consumo están convencidos de que la decisión es correcta porque dejará "más dinero en el bolsillo de los consumidores, lo que incentivará el consumo, porque las empresas tendrán mayor capacidad de seguir invirtiendo".
Los representantes han destacado que la recuperación económica está empezando, pero le han trasladado a Montoro que es "muy heteregónea". En concreto, le han informado que el sector de la alimentación y está atravesando un "año especialmente duro, quizás el peor de la crisis", ya que está viéndose especialmente afectado por la deflación y unos movimientos geográficos que están empobreciendo a la sociedad española.
El sector ha trasladado al ministro de Hacienda que reducir el gasto público no quiere decir reducir las prestaciones sociales y ha destacado la importancia de seguir invirtiendo en educación y en I+D, principales palancas para mantener el estado de bienestar y contar con profesionales altamente cualificados.
Los directivos de las diferentes compañías comunicaron al Gobierno su voluntad de apoyar, dentro de sus posibilidades, cualquier medida antifraude que ayude a atajar este problema y a incrementar la transparencia.
Por su parte, la Asociación Españaola de Distribuidores Autoservicios y Supermercados (Asedas) ha valorado "muy positivamente", que, a pesar de las presiones de muchos organismos, Hacienda escuchara a las principales organizaciones del gran consumo, incluida la distribución, y no se subiera el IVA o se reclasificara los tipos en el Proyecto de Reforma Fiscal.
Asedas ha recordado en un comunicado que la medida tendría un "efecto negativo" tanto en los ciudadanos como en el consumo de los hogares y que el sector ya comprobó el perjuicio sobre el consumo que ocasión la anterior subida del IVA, que llevó a seis meses consecutivos de caídas.
