Economía/Laboral.- Becker, Premio Nobel de Economía, apuesta por abaratar el despido para mejorar la tasa de desempleo

Actualizado: viernes, 16 junio 2006 0:16


MADRID, 15 Jun. (EUROPA PRESS) -

El Premio Nobel de Economía (1992) y catedrático de la Universidad de la Universidad de Chicago, Gary S. Becker, apostó hoy por la puesta en marcha de políticas más flexibles en el mercado laboral encaminadas a abaratar los costes del despido como mejor fórmula para reducir la alta tasa de desempleo.

Durante la conferencia que pronunció esta tarde en la Fundación San Pablo-CEU de Madrid bajo el título 'El mercado laboral en Europa', el Premio Nobel de Economía subrayó la necesidad de combatir el problema del paro, sobre todo el de largo plazo, a través de políticas que permitan a las empresas contratar y despedir trabajadores con más facilidad.

Como se recordará, el Fondo Monetario Internacional (FMI) ha instado a España a que siga avanzando en el abaratamiento de los costes del despido. Becker también se refirió, acto seguido, a la apuesta de algunos países por la contratación temporal y, en este sentido, incidió que no era partidario de la misma, aunque reconoció que "mejor" eso que nada.

En líneas generales, el economista incidió en que la regulación actual del mercado laboral es "excesiva" en la mayor parte de los países europeos, cuestión que calificó como "un problema evidente".

Becker defendió igualmente la aplicación de recortes en la tasa sustitutoria, es decir, que se reduzca el dinero que percibe un desempleado por el paro, para evitar que la gente permanezca demasiado tiempo sin empleo.

En este sentido, defendió que la cantidad a percibir en concepto de desempleo sea tal que una persona "no se muera de hambre" pero que tampoco de "para vivir de lujo". Asimismo, ésta debería cobrarse durante un tiempo limitado.

Entre las medidas que propuso --en calidad de economista, remarcó, y no de gobernante con responsabilidades políticas-- apostó por retrasar la edad de jubilación de los trabajadores. Respecto a este punto, arguyó que actualmente se está produciendo la "paradoja" de que la población goza de mayor salud pero, en cambio, se jubila antes.

"Estamos animando a la gente a que salga antes del mercado laboral aunque viva más tiempo", precisó el catedrático, quien además abogó por combatir los bajos niveles de natalidad que actualmente sufren la mayoría de los países europeos con políticas incentivadoras ya que esta variable conllevará a largo plazo una problemática en torno a la financiación de las pensiones.

En relación con este tema, señaló que los Gobiernos deberían atraer, mediante "políticas generosas", la inmigración a sus países de personal cualificado que contribuyan con el crecimiento económico. En cuanto a la inmigración irregular, matizó, la única solución que apuntó es la de penalizar al empresario que contrate irregulares.

ALENTAR LA INVERSIÓN Y CREACIÓN DE EMPRESAS

Otro de los aspectos sobre los que habría que incidir, enfatizó, es el de la productividad, de la que dependen "los cimientos del crecimiento económico", y la fórmula conveniente por la que apostó sería por la creación de nuevas empresas.

Para ello, consideró necesaria una política de incentivos que posibilite eliminar las barreras a las que se enfrenta un empresario a la hora de crear un nuevo negocio como facilidades administrativas o de contratación, así como la reducción de impuestos, que alentaría la inversión.

El "'cocktail'" resultante de aplicar todas estas variables, enfatizó, repercutiría en el auge del empleo privado y, por tanto, en el crecimiento económico.

Al acto, organizado por la Fundación para el Análisis y los Estudios Sociales (FAES), también acudió el presidente de esta institución, José María Aznar, encargado de presentar la conferencia de Berker, al que definió como "un gigante intelectual" y de cuyo trabajo destacó su aplicación práctica en "muchísimas políticas públicas" y en ámbitos que afectan a la vida cotidiana.

El ex presidente del Gobierno enfatizó que "Europa tiene un grave problema de desempleo" y señaló que "la mejor política social es el empleo". "No es sólo la región que menos crece en el mundo, el farolillo rojo del crecimiento mundial, sino que además produce millones de parados", concluyó.