VIGO, 5 May. (EUROPA PRESS) -
El centro de PSA-Peugeot Citroën admitió, en un comunicado que dio a conocer hoy, que la huelga del sector del metal en la provincia de Pontevedra ha provocado "importantes alteraciones" en la producción de la planta viguesa y de algunas de sus empresas proveedoras.
La firma automovilística recuerda en dicho comunicado que las movilizaciones en el marco de un conflicto laboral deben partir del "previo respeto" hacia las libertades individuales y colectivas de los ciudadanos y de los trabajadores, al tiempo que hace un llamamiento para que se evite acciones "irresponsables y violentas no justificables".
PSA-Peugeot Citroën explica que el tejido industrial gallego debe construirse con "sensatez y respeto", y advierten de que si se actúa de otra forma, se daña de forma "irreparable" la imagen de la industria gallega y se comprometen el clima social necesario para un buen desarrollo de la actividad económica, así como la atracción de futuras inversiones en la provincia.
Por otra parte, la factoría viguesa insta a los representantes empresariales y sindicales a que retomen el diálogo, y muestra su reconocimiento a los trabajadores de la planta y a sus proveedores, por su "ejemplar comportamiento".
ACCESOS BLOQUEADOS
Precisamente la factoría viguesa de PSA Peugeot Citroën está siendo uno de los objetivos de los manifestantes del sector del metal, que acudieron ayer y hoy a las puertas de la fábrica, donde se concentraron y bloquearon los accesos por carretera, impidiendo a los operarios del turno de tarde que pudiesen comenzar su trabajo dentro del horario.
Los sindicatos han entregado hoy en el edificio administrativo de la Xunta en Vigo la convocatoria del huelga general para todo el sector, a partir del día 11 de mayo, con lo que estarían llamados a participar en el paro indefinido todos los trabajadores de astilleros, industria auxiliar metalúrgica, talleres de coches, instaladores, fontaneros, etc., incluidos los empleados de Citroën, a pesar de que tienen convenio propio.
