VIGO, 14 Ene. (EUROPA PRESS) -
Los miembros del comité de empresa de Cableados Auto --antigua Valeo-- han pasado la primera noche de encierro en las oficinas del Clúster de Empresas de la Automoción de Galicia (Ceaga) y mantienen su decisión de continuar hasta que su presidente y presidente del Grupo Viza, Antonio Vega, acceda a entrevistarse con ellos.
Los trabajadores, junto a representantes sindicales de la CIG, comenzaron en la mañana de ayer su encierro en las oficinas del Clúster y han desplegado una pancarta en la fachada del edificio con el lema 'Valeo en loita'. Además, desde primera hora se acercaron al lugar compañeros de la empresa que están fuera de turno --que trabajan de tarde-- y que han acudido provistos de pancartas de apoyo.
La presidenta del comité, Amelia Vila, acusó a Antonio Vega de ser "cómplice de unos cacos", en el proceso de venta de Valeo, "con el aval de la Xunta". En ese proceso, 58 personas del total de 150 de la plantilla, pasaron a trabajar en el Grupo Viza, mientras que el resto pasaron a Cableados Auto, pendientes de un plan industrial o, en caso de que no hubiera acuerdo, del cierre de la planta y de las correspondientes indemnizaciones.
Vila acusó a los responsables del Grupo Viza de haber intervenido en la operación con el único fin de hacerse con la nave de la empresa con un objetivo "de especulación inmobiliaria", y recordó que los empleados "siguen esperando" a tener noticias por parte de Cableados o de la Xunta. "Seguimos yendo a nuestros puestos, pero no hay actividad en la fábrica", precisó.
Por su parte, fuentes de Ceaga confirmaron a Europa Press que Vega "está de viaje, pero accede a recibir a los trabajadores el jueves", una afirmación que el comité calificó de "mentira para lavarle la imagen". Así, sostienen que Antonio Vega, que también es presidente del Grupo Viza --donde se recolocaron 58 trabajadores de Valeo--, está en las instalaciones de Ceaga, y que no se moverán de allí hasta que les reciba.
