Avisan que esta medida les quitaría el apoyo de los marineros en sus demandas
VIGO, 2 Jun. (EUROPA PRESS) -
Los sindicatos advirtieron hoy de que la intención de los armadores de enviar a las tripulaciones al paro, para que la Seguridad Social se encargue de darles cobertura, es "una tontería y una ilegalidad", y acusan a la patronal de querer "cargar" a las arcas públicas las consecuencias de su "decisión unilateral" de amarrar la flota.
Según explicó en declaraciones a Europa Press el responsable de Mar de CC.OO. en Galicia, Ramiro Otero, "es muy fácil decir ahora como yo no puedo, que cargue el Estado", y denunció que el amarre de los barcos, como medida de protesta por el aumento del precio del gasóleo y contra la pesca ilegal "es un cierre patronal".
En ese sentido, manifestó su esperanza de que la Administración no acceda a las pretensiones de los armadores y "que aplique la legalidad vigente y no sea cómplice", al tiempo que volvió a reclamar la constitución de una mesa bipartita en la que el Estado, los sindicatos y la patronal analicen la situación del sector "pero no sólo el problema del gasóleo, sino también la negociación del convenio colectivo, la seguridad, o la comercialización".
Ramiro Otero insistió en que "se debe hacer un análisis desde abajo", teniendo en cuenta también a los trabajadores autónomos "que no reciben ayudas", antes de concretar medidas como el desguace de la flota. Asimismo, recordó que, a pesar de las quejas de los armadores, "ellos mismos han contribuido a la desprofesionalización del sector".
"ILEGALIDAD".
Por su parte, el secretario de CIG-Mar, Xabier Aboi, también calificó la propuesta de los armadores como "una tontería de quien piensa con los pies", y una "ilegalidad". "¿Cómo piensan meter esa medida en un expediente de regulación de empleo?", preguntó.
El representante nacionalista calificó de "idiotez" que los armadores puedan renunciar así al apoyo de los tripulantes en sus reivindicaciones, y exigió a la patronal pesquera "que unifiquen 4 ó 5 propuestas serias para plantear a los sindicatos". Asimismo, invitó a los empresarios a que "planteen batalla" como en Francia y en Portugal, porque "éste no es sólo un problema de los armadores".
