MADRID, 30 Dic. (EUROPA PRESS) -
La Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT) ha aprobado la regulación definitiva para los mercados de terminación de llamadas de voz en redes fijas y móviles para los próximos dos años, informó hoy el organismo regulador del mercado.
Los servicios de terminación son aquellos que se ofrecen los operadores entre sí y que permiten a un operador (fijo o móvil) completar una llamada de voz que realiza un usuario de otro operador en su propia red.
Para las terminaciones a través de redes móviles, la CMT establece la obligación de control de precios de terminación para los operadores de móviles Movistar, Vodafone, Orange, Xfera (actual Yoigo), Euskaltel, ONO, R Cable, E-Plus, Telecable, BT, Jazztel, Best Telecom y Fonyou. Según esta obligación, durante los próximos dos años se mantendrá un sistema de regulación de precios basados en un 'glide path', un mecanismo de control según el cuál los precios se reducirán semestralmente a lo largo del nuevo periodo de regulación.
En el caso de las tres grandes operadoras, Movistar, Vodafone y Orange, la CMT dice que los precios deberán estar orientados a sus costes de producción, determinados a través de un 'glide path' que fijará antes del 30 de julio de 2009, con el fin de que los nuevos precios entren en vigor a partir de octubre de 2009.
En cuanto a la cuarta compañía de telefonía móvil con red propia, Yoigo (antes Xfera Móviles), también estará sometida a un nuevo 'glide path' pero, como ya avanzó el pasado 1 de agosto, se aplicará una reducción del margen actual con el que cuenta actualmente la operadora (48,82 por ciento). La reducción también se determinará antes del 30 julio de 2009 y para que entre en vigor el 15 de octubre de ese año.
La decisión del organismo se fundamenta en que Yoigo soporta mayores costes por el despliegue de una nueva red móvil UMTS y en que cuenta aún con una base de clientes y volumen de tráfico reducidos.
TERMINACIÓN EN REDES FIJAS.
En cuanto a las terminaciones en redes fijas, el organismo regulador ha decidido mantener las obligaciones que ya impuso en el año 2006, según las cuales los precios de Telefónica los fijará la CMT y deberán estar orientados a los costes de producción, mientras que los operadores alternativos deberán mantenerse dentro de un margen máximo del 30 por ciento con respecto a los precios nominales de terminación geográfica de Telefónica.
La CMT justificó la necesidad de fijar unos precios regulados en que la situación en la que se desarrolla este mercado no es de "competencia efectiva". Asimismo, la comisión determinó que Telefónica deberá llevar cuentas separadas por la prestación de las actividades de acceso e interconexión, además de publicar una oferta de referencia desglosada (OIR).
