Economía/Transportes.- Álvarez justifica el retraso del 'nuevo Barajas' para evitar su coincidencia con Fitur

Actualizado: miércoles, 25 enero 2006 19:28


MADRID, 25 Ene. (EUROPA PRESS) -

La ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, atribuyó hoy el aplazamiento de una semana de la inauguración de la nueva terminal T4 del aeropuerto Madrid-Barajas a la necesidad de evitar la coincidencia en el tiempo de la puesta en funconamiento de las nuevas instalaciones con la celebración de la Feria Internacional de Turismo (Fitur 2006).

"No hemos querido hacerla coincidir --la apertura del 'nuevo Barajas-- con Fitur, para no correr el riesgo de dar una imagen que no se corresponde con la realidad", ante los problemas que previsiblemente se producirán en la primera jornada de operaciones de todos los nuevos sistemas, explicó Álvarez, presente en la Feria Internacional de Turismo (Fitur 2006). "Fitur es el gran escaparate de España al mundo", indicó.

Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) ha decidido aplazar una semana la inauguración de la nueva terminal T4 del aeropuerto de Madrid-Barajas, que finalmente tendrá lugar el próximo 5 de febrero --frente a la fecha del 29 de enero hasta entonces fijada--.

AENA subrayó que la decisión de aplazar la apertura del 'nuevo Barajas' se ha adoptado de "común acuerdo" con las compañías aéreas afectadas por el cambio de planes. En la nueva terminal T4 del aeropuerto madrileño operarán a partir de febrero un total de 29 aerolíneas, que concentrarán más del 60% del tráfico total que soporta Barajas.

La nueva T4 acogerá las operaciones de Iberia y sus socias en la alianza aérea Oneworld (British Airways, American Airlines, LAN, Finnair, Aer Lingus, Cathay Pacific y Qantas), así como de otro grupo de compañías no integradas en ninguna alianza, entre las que figuran Air Nostrum --franquiciada de Iberia para vuelos regionales--, Aeroflot, Avianca, Japan Airlines, Iberworld o SN Brussels.

La puesta en servicio de la nueva terminal de Barajas --que ha requerido inversiones por valor de 6.200 millones de euros-- permitirá duplicar la capacidad operativa del aeropuerto madrileño, hasta poder acoger un total de 70 millones de pasajeros anuales, frente a los 35 millones que ahora contabiliza, y elevar de 78 a 120 el número de operaciones de aeronaves a la hora.