Las aerolíneas buscan consolidarse y aprovechan las oportunidades de mercado que ofrecen las compañías perjudicadas por la crisis
MADRID, 31 Oct. (EUROPA PRESS) -
La crisis del sector aéreo dejó en tierra 1.083 aeronaves en el primer semestre, o lo que es lo mismo, el 5% de la flota aérea mundial, según explica la prensa británica consultando los datos compilados por la consultora Ascend Aviaton Consultancy.
Cerca del 75% de estas retiradas de aviones se produjeron en Norteamérica, donde las aerolíneas, lastradas por la acuciante crisis económica, el descenso de la demanda y el encarecimiento del combustible, han reducido un 10% su capacidad.
En una entrevista con el diario británico 'Financial Times', el director de Ascend calcula en el 3% el recorte de capacidad de las aerolíneas europeas y en el 2% en el caso de las asiáticas.
El consejero delegado de la Asociación Internacional del Transporte Aéreo (IATA), Giovanni Bisigniani, recordó esta misma semana en Estambul que el deterioro del tráfico es alarmantemente rápido y generalizado. "No habíamos visto un descenso en el tráfico de pasajeros desde 2003", destacó.
"Incluso las buenas noticias de que el precio del petróleo ha caído hasta la mitad de los picos alcanzados en julio son insuficientes para contrarrestar el impacto en la caída de la demanda", destacó el responsable de la asociación, quien apuntó que, en este contexto, las pérdidas de las aerolíneas podrían superar la frontera de los 5.200 millones de dólares (4.14 millones de euros) previstos por la IATA.
PERIODO DE CONSOLIDACIÓN.
La crisis del sector aéreo no sólo está obligando a dejar los aviones en tierra, sino que también está llevando al sector a cambios estructurales y a un profundo proceso de consolidación.
La aerolínea más activa en dicho proceso es la alemana Lufthansa, que tras adquirir Brusells Airlines, compró esta semana la británica bmi y está cerca de cerrar un trato para hacerse con la compañía de bandera austriaca, Austrian Airlines (AUA).
En Italia, Lufthansa rivaliza con Air France para la adquisición de una participación minoritaria en Alitalia, mientras el mercado espera un acercamiento y próxima oferta sobre el grupo SAS, propietario de Spanair en España.
En Norteamérica Delta y Norwest se fusionan y a nivel nacional, Iberia está en pleno proceso de fusión con British Airways, un trato que se ha retrasado por la crisis influído también por el precio de las acciones y del plan de pensiones de la británica.
