MADRID, 4 Mar. (EDIZIONES) -
La salud del euro no es la envidia de las divisas vecinas. El contexto débil en el que se encuentran la política y la economía de la Eurozona y las expectativas sobre la reunión de marzo del Banco Central Europeo harán difícil que la moneda única tenga un buen desempeño frente a otros cambios de referencia, incluida la libra.
Durante la última semana los inversores reaccionaron positivamente a los buenos datos en EEUU y la compra de dólares se incrementó. Una reacción contraria a la que se produjo en Reino Unido, donde la venta de libras se incrementó, motivada por el miedo a la posible salida del país de la eurozona tras el 23 de junio.
Estos comportamientos opuestos marcaron una tendencia diferente entre el dólar y la libra, que acabaron un 1% por arriba y por abajo, respectivamente, en su referencia con el euro.
EURO
Los datos de la pasada semana han sido decepcionantes en la eurozona. El índice compuesto se redujo por tercera vez consecutiva situándose en 52,7 y los principales índices de confianza empresarial PMI cayeron más de lo esperado.
Estos malos resultados fortalecen la posición del presidente del BCE, Mario Draghi, de quien se espera que tome medidas agresivas que podrían incluir recortes del tipo repo y la expansión del programa de flexibilización cuantitativa.
La pérdida de las ganancias de febrero, el mal rendimiento de la Eurozona y lo que pueda suceder a raíz de la reunión del BCE hacen que las previsiones para la moneda común no sean buenas frente a las demás divisas, incluida la libra.
LIBRA
El temor al brexit dominó a los mercados durante toda la semana. La exposición pública de varios políticos de su intención de no permanecer en la eurozona provocó el miedo en los mercados de divisas. Esto empujó a la libra que cayó frente al dólar hasta situarse en niveles de la crisis financiera de 2008.
A pesar del miedo, los resultados de seis encuestas auguraron una mayoría del sí, lo que redujo la tensión en los mercados y ayudó a que la divisa se estabilizase respecto al euro a finales de semana pasada.
En los próximos días se hará público el índice de sentimiento empresarial PMI que se espere que permanezca por encima del 56 en el caso del índice compuesto, lo que sería compatible con un crecimiento económico de la zona del 2% anual y denotaría que la depreciación de la libra ha sido una reacción excesiva.
DÓLAR
Las buenas noticias para la economía estadounidense afinazan la buena posición del dólar frente a casi todas las divisas principales en lo que se ha convertido en un muy buen comienzo de año.
El aumento del PIB durante el último semestre de 2015 se suma al aumento del índice de inflación subyacente que ha pasado del 1,4% al 1,7% en enero, un dato que confirma las previsiones optimistas sobre la inflación al consumidor y a los salarios de los estadounidenses.
